Científico estadounidense abordó en Valdivia la contaminación oceánica
MARCUS ERIKSEN. Invitado por la Embajada de Estados Unidos en Chile y en conjunto con la Universidad Austral, el experto dictó la charla "Salvando nuestros mares sintéticos".
Hace cuatro años el científico Marcus Eriksen recorrió las costas de Valdivia hasta Isla de Pascua. En ese viaje, extrajo muestras de residuos que flotan en el océano. Saliendo de Valdivia, esas muestras fueron "muy limpias". Sin embargo, aproximándose al centro de las corrientes circulares -donde se acumula la basura plástica desechada por el ser humano- encontró 400 mil partículas por kilómetro cuadrado.
Esa fue la primera evidencia de una zona de acumulación de plásticos en el Hemisferio Sur. A nivel global, según informó, en los océanos existen 269 mil toneladas, lo que se traduce en 5.5 trillones de partículas por kilómetro cuadrado.
Esta semana Eriksen volvió a Valdivia. Esta vez en medio de una gira que realiza por el país.
Invitado por la Embajada de Estados Unidos en Chile, su visita está inserta en el programa de actividades que antecede a la conferencia "Nuestro Océano", organizada por el Gobierno con el objetivo de convocar a los países participantes a diseñar e implementar medidas efectivas para proteger los océanos.
En la capital de Los Ríos, y organizada en conjunto con la Universidad Austral de Chile a través de American Corner, el científico dictó la conferencia "Salvando nuestros mares sintéticos".
Impactos
"Lo que sabemos es que los residuos plásticos en el océano son muy peligrosos", aseguró y enfatizó en tres aspectos: los plásticos son micropartículas que se distribuyen a través de todos los océanos; absorbe los contaminantes como pesticidas, químicos industriales e inclusive los aceites de los autos, y genera un impacto en todos los ecosistemas.
Respecto a la fauna marina, señaló que hay quienes plantean que mueren 100 mil animales. "Sin duda es muchísimo más porque cuando mueren los animales se hunden", explicó.
Agregó que "el Centro para la Diversidad Biológica publicó un informe que decía que 663 especies han sido identificadas con plástico dentro de su cuerpo o alrededor y aumenta el número rápidamente. Se publicó un paper la semana pasada que sugiere que en el año 2050 todas las aves marinas tendrán plásticos en sus estómagos".
A juicio del experto, existe una cultura del plástico y hay muchas fuentes de donde éste proviene: cremas para la piel, fibras de los textiles sintéticos, equipamientos de pesca, entre otros.
Soluciones
"Estamos descubriendo que de nuestros hábitos de consumo están resultando montañas de basura y también el costo verdadero de la basura", dijo.
Como ejemplo, señaló que en el Líbano los ciudadanos están protestando contra la basura.
Explicó que iniciativas en torno al uso de las bolsas plásticas son positivas. "Cuando el consumidor comienza a hablar es cuando comienza el cambio", expresó.
En ese sentido, dijo que las personas pueden contribuir mucho a evitar que el plástico siga llegando a los océanos. "Se puede hacer investigación y educación", dijo.
"Yo sé que en Chile se han realizado iniciativas en ciencias ciudadanas en las playas. Muchas personas trabajan en el mundo en el tema de la cuantificación de los residuos plásticos, cuánto hay, qué tipo es, categorizarlo", agregó y concluyó que "son estos pequeños grupos de ciudadanos que pueden llevar el tema a las autoridades y al público".
En ese sentido, dijo que "hay mucha esperanza porque el océano no guarda los microplásticos para siempre. Si nosotros podemos evitar la llegada de nuestro plástico al mar, con el tiempo el oceáno se limpia".
Y en ese contexto, explicó que el mensaje que entrega en cada conferencia que dicta es la responsabilidad que tiene la persona, el gobierno y las empresas en cuanto a la producción y a la generación de basura.
Su experiencia en la materia
El científico Marcus Eriksen es graduado en Ciencias de la Tierra, de la Universidad de Nueva Orleans, y posee el grado de doctor en Ciencias y Educación, de la Universidad del Sur de California. Junto a sus colaboradores de la ONG 5 Gyres, Eriksen ha navegado más de 40 mil millas siguiendo las corrientes marinas para cuantificar la cantidad de plásticos que hay en el océano, determinar su origen y desplazamiento, así como estudiar sus efectos en los ecosistemas marinos.