Una serie de reuniones para analizar el problema de la violencia rural se encuentra realizando el intendente de la región de Los Ríos Egon Montecinos y, según ha explicado en varias entrevistas, su idea es conocer las inquietudes de organizaciones gremiales, grupos sociales, comunidades mapuches, empresarios y políticos, frente a este problema, que ha presentado señales en el territorio local.
Estos encuentros de la autoridad debieran servir como preparación para la realización de mesas de diálogo en las cuales todos los actores interesados se reúnan y busquen caminos de entendimiento, que eviten la reproducción de hechos como los ocurridos en Bío Bío y La Araucanía.
Así vista, la iniciativa merece respaldo y aprobación. Es de esperar que cuente con ellos en forma transversal, pues no se trata de un proceso sencillo, sobre todo en puntos de la región donde ha habido hechos delictuales como las comunas de Lanco y Río Bueno, donde se ha desplegado acciones policiales y medidas como invocación a la Ley Antiterrorista.
Grupos de comuneros y de agricultores se han manifestado públicamente en esas ciudades y en Valdivia, señalando su descontento y pidiendo al gobierno que cumpla su rol de garante de derechos que sienten vulnerados.
Algunos dirigentes de comunidades han dicho. incluso, que no participarán en conversaciones mientras sigan operando Fuerzas Especiales en sus zonas.
Son miradas diferentes a un mismo problema, frente a las cuales es necesario proceder con extrema prudencia y apelando a la búsqueda de la convivencia en paz y respeto, por sobre diferencias o consideraciones adicionales.
Es importante, entonces, que todas las instituciones y personas que puedan colaborar en el éxito de un diálogo regional, lo hagan. Sobre todo aquellos que tienen responsabilidades en cumplir compromisos postergados, o quienes puedan liderar procesos que disminuyan la desigualdad, la pobreza y la discriminación, factores que están en la base de los conflictos.
Es necesario colaborar para que esta región se desarrolle en forma armónica, como quiere la mayoría.