Hace pocos días fue celebrado el Día del Padre, que tradicionalmente se recuerda el tercer domingo de junio, con el objetivo de relevar la figura paterna y el vínculo de los varones con sus hijos e hijas.
Lamentablemente, esta fecha no tiene la misma connotación del Día de la Madre. De hecho se realizan pocos actos especiales, escasos homenajes públicos y hasta los contextos publicitarios son menores que en la fiesta de mayo. Las razones pueden ser múltiples y quizás se entiendan en un país donde uno de cada cuatro hogares es liderado por una mujer.
Esa realidad permiten también comprender -pero no justificar- por qué en temas como la discusión legal del aborto por tres causales no existen menciones a la responsabilidad de los hombres en una decisión de ese tipo; ni sobre las obligaciones y derechos de la paternidad. La discusión -y la estigmatización social- se ha centrado solamente en las mujeres, en las adolescentes y en las niñas; a lo más en los padres de ellas, pero no en los progenitores de los bebés por nacer. Lo mismo pasa con los embarazos adolescentes y cuando se habla de roles domésticos. Es decir, subsiste en el país una cultura que convierte al papel del padre en algo diferente, casi voluntario y con escasa sanción real cuando se falla a él.
Por supuesto, y por fortuna, existen muchas excepciones. Pero todavía son noticia cuando se presentan casos de hombres "solos" a cargo de sus niños.
En este escenario, claramente se requiere de una reflexión social seria y un cambio educacional que permita, especialmente a los jóvenes, tomar conciencia del derecho, del deber y de la alegría que significa asumir la paternidad.
Y resulta especialmente necesario en Los Ríos, considerando que la región presenta un 28,2% de hogares monoparentales a cargo de mujeres, uno de los índices más altos de Chile (promedio nacional es 25.9%, según Observatorio Social, 2011); y situaciones como la descrita en la última cuenta pública de la PDI en Valdivia, referida a las detenciones efectuadas durante 2016, para lograr que se pagaran 813 millones de pesos adeudados en pensiones alimenticias.