Las ciencias de la tierra y los desastres naturales son monitoreados por la Uach
Un grupo de investigadores de la Facultad de Ciencias de la Universidad Austral de Chile, liderados por el doctor Eduardo Jaramillo, iniciaron días después de la erupción del Cordón Caulle, el monitoreo ambiental de doce ríos aledaños a la zona con la certeza que se encontraban frente a la oportunidad única de conocer la velocidad de recuperación ambiental de estos afluentes altamente alterados por el desastre natural.
La motivación principal estaba dada porque los científicos ya contaban con información preliminar de varios de estos ríos, lo que permitiría conocer el antes y después de la erupción del Caulle, en relación a la calidad ambiental de los cauces hídricos, incluyendo características físicas y químicas del agua, diversidad y abundancia de la fauna de insectos acuáticos y peces.
Durante dos días y luego de aproximadamente un año desde el último estudio, el doctor Jaramillo, junto a los geólogos de la Facultad de Ciencias, doctores Alexandre Corgne y Jasper Moernaut, acompañados por el cineasta Felipe Dreves, llevaron a cabo la segunda expedición al Complejo Volcánico Cordón Caulle - Puyehue, con los objetivos de monitorear las condiciones de los ríos que nacen en las laderas mismas del volcán y la obtención de nuevas imágenes para la elaboración de un documental sobre los efectos de este desastre natural y cuyo registro audiovisual se inició inmediatamente después de ocurrida la erupción en junio del año 2011.
Durante esta segunda expedición al volcán, los investigadores de la Uach tuvieron la posibilidad de observar la extensión de la colada de lava arrojada por el Caulle y verificar de este modo que la erupción del año 2011, fue más intensa que la ocurrida el 24 de mayo de 1960, dos días después del terremoto más grande registrado en la historia del hombre.
Luego de los primeros muestreos en 2011, el grupo liderado por el doctor Jaramillo encontró que los ríos Nilahue y Gol Gol (ubicados en la ladera norte y sur del volcán, respectivamente) tenían mayor carga de piedra pómez y cenizas en su caudal que otros ríos más alejados. Esto se ha mantenido en el tiempo, comprobándose que el agua de ambos cauces ha presentado mayor conductividad (sales disueltas) y mayores concentraciones de sólidos particulados suspendidos, sílicatos (proveniente en parte de las cenizas expulsadas por el volcán) además de flúor.
Como antecedente se cuenta que días después de la erupción personal de Sernageomín midió temperaturas de hasta 45° celsius en la parte superior del río Nilahue, lo que puede haber influido en la ausencia de peces durante los primeros muestreos de los estudios de la Uach.
Además, de acuerdo a estudios realizados por el grupo del doctor Jaramillo, se pudo comprobar que las piedras pómez arrojadas por el macizo y transportadas por los ríos hacia los lagos Ranco y Puyehue, llegaron finalmente hasta la costa marina aproximadamente tres meses después de la erupción. Desde la costa de Osorno, esas piedras fueron transportadas tan al norte como la Isla Mocha y la costa del Biobío sirviendo de sustrato a un crustáceo denominado lepas, pariente de los picorocos y con un pedúnculo blando con el que se adhieren a cualquier objeto flotante.
Durante la expedición 2014, Jaramillo tuvo entonces la posibilidad de analizar las aguas del río Los Venados, en su nacimiento, aproximadamente a cinco kilómetros de donde se produjo la erupción del Caulle, ocasión en la que pudo constatar las diferencias sustanciales en la calidad del agua, respecto al río Nilahue.
"Los Venados ha tenido durante este estudio mayores abundancias de insectos acuáticos y peces, por lo que podemos concluir que la carga de material volcánico que recibió en su cauce no fue lo suficientemente alta como para afectar la abundancia de la vida acuática como en el Nilahue, donde sus aguas aún presentan las consecuencias de la erupción. Lo interesante en relación a los insectos acuáticos (alimentos de los peces), es que estos comenzaron a tener abundancias similares a las observadas en el río Los Venados, aproximadamente un año después de la erupción.
Sin embargo, tal recuperación no se observa en la fauna de peces, lo que indica que en el río Nilahue persisten características que impiden la recuperación de la fauna íctica del área", aseguró el experto.
Por su parte, el doctor Alexandre Corgne, director de la carrera de Geología de la Uach, expresó que la Universidad Austral de Chile se encuentra en una zona privilegiada para el desarrollo de las Ciencias de la Tierra, debido entre otras cosas a la cercanía de la misma a volcanes activos como el Villarrica y el mismo Volcán Caulle o a la historia de grandes terremotos que han afectado a la región del sur de Chile.
En esa línea, relató que durante el año 2013 se adjudicaron un proyecto en el Primer Concurso Nacional de Apoyo a Actividades de Divulgación "Chile Laboratorio Natural" del Programa Explora de Conicyt, que involucra la participación de las Ilustres Municipalidades de Futrono y Lago Ranco.
El proyecto "Volcanes y Terremotos en tu Liceo", es dirigido por el propio doctor Corgne, teniendo como director alterno a Eduardo Jaramillo y acomo sesor científico al geólogo y decano de la Facultad de Ciencias, doctor Mario Pino.
"El objetivo principal del proyecto es sensibilizar a a población de comunidades vulnerables (los estudiantes en particular) sobre las causas y consecuencias de los sismos y erupciones volcánicas. En este contexto, ya hemos desarrollado actividades didácticas a 600 escolares de cuatro establecimientos de Futrono, Llifén, Ignao y Lago Ranco. Durante el período 27 - 30 de enero desarrollaremos otras actividades de difusión científica para público general en Futrono (27-28 de enero) y en Lago Ranco (29-30 de enero)", dijo. Entre tales actividades, destaca la presentación del Documental "La erupción del Volcán Caulle: de principio a fin".
Por último, Corgne sostiene que a través de la difusión de los conocimientos científicos de los investigadores de la Facultad de Ciencias de la Uach, se espera que la población de las comunas ribereñas del lago Ranco pueda minimizar su vulnerabilidad frente a los desastres geológicos como la erupción del Volcán Caulle.