Rocío Valverde Grau
La Corte de Apelaciones de Valdivia resolvió por unanimidad desaforar al diputado Rosauro Martínez (RN), a quien se le acusa de homicidio calificado en contra de tres militantes del MIR, en 1981.
En la audiencia realizada ayer en la capital de Los Ríos, el pleno del tribunal de alzada acogió la solicitud de la ministra en visita Ema Díaz, quien investiga causas por violación a los derechos humanos en esta jurisdicción.
Las víctimas en el caso son Próspero del Carmen Guzmán Soto, Patricio Alejandro Calfuquir Hernández y José Eugenio Monsalve Sandoval, quienes fueron asesinados el 20 de septiembre de 1981, en el sector de Remeco Alto, Panguipulli.
Según se indica en el fallo de la Corte de Apelaciones, los antecedentes de la investigación son suficientes para tener sospechas fundadas de la participación de Martínez en los hechos, debido a que en esa fecha se desempeñaba como comandante de la Compañía de Comandos Nº8 del Batallón Llancahue, dependiente de la Cuarta División del Ejército.
En el documento donde se detalla el fallo, se señala que "habiéndose verificado en la presente gestión la concurrencia de los presupuestos exigidos por el artículo 612 del Código de Procedimiento Penal para dar lugar a la formación de causa respecto del diputado señor Rosauro Martínez Labbé, se accederá a la petición de desafuero formulada por los querellantes en los términos que se dirá en lo resolutivo del presente fallo".
Vladimir Riesco, abogado querellante en la causa, explicó que la solicitud de desafuero fue presentada por familiares de las víctimas y por la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos.
El abogado sostuvo que "hay muchos antecedentes, documentales y testimoniales, que prueban la participación de Rosauro Martínez en los homicidios. De hecho, hay un expediente antiguo de la justicia militar. También tenemos testigos presenciales, todos militares que participaron en el operativo y que sitúan al diputado en el sitio de los hechos, como comandante del batallón de comandos".
Riesco también explicó que existe un auto de procesamiento dictado en junio de 2011, en el que se somete a proceso a dos agentes de la Central Nacional de Informaciones (CNI), quienes participaron de apoyo en el operativo ejecutado por el batallón comandado por el ahora diputado.
En tanto, ante el supuesto enfrentamiento entre los militantes del MIR y los militares bajo el mando de Martínez, el abogado aclaró que "las víctimas se encontraban en estado de desnutrición, en notable desventaja numérica y además los informes de autopsia revelan un gran número de disparos, por lo que no se pudo tratar de un enfrentamiento".
Finalmente, respecto a la apelación ante la Corte Suprema que realizará el acusado, Riesco señaló que "es lógico que apelen, es su derecho, pero en atención a la cantidad de antecedentes de los cuales disponemos, esta resolución va a ser confirmada. Confiamos en eso porque hay méritos suficientes".
Desde que se le sindicó como responsable de la muerte de los tres miristas, el diputado Martínez ha insistido en su inocencia e incluso ha afirmado que es víctima de "una injusticia". Fue así como el año pasado sostuvo que confía plenamente en la justicia, debido a que ya han habido dos procesos en los que ha sido absuelto.
Respecto del fallo emanado ayer, el abogado Fernando Senger, quien representa al diputado RN por el distrito 41, dijo a SoyChillán.cl que "es un fallo procesal al cual vamos a apelar. Tenemos cinco días para enviar esta apelación a la Corte Suprema".
Además, el abogado agregó que "con este fallo, el diputado Martínez no queda fuera de sus funciones, sólo queda a disposición de los tribunales correspondientes, para que sea interrogado por los hechos sucedidos en Valdivia".
"Es un fallo procesal al cual vamos a apelar. Tenemos cinco días para enviar esta apelación a la Corte Suprema".
Fernando Seger
Abogado de Rosauro Martínez
Eugenio Monsalve, Próspero Guzmán y Patricio Calfuquir habrían pedido ayuda en la casa de la madrina del primero, pero la mujer los delató, razón por la que el 20 de septiembre de 1981 la vivienda (ubicada en Remeco Alto fue asaltada por las tropas que comandaba el ex capitán Martínez. Los tres miristas murieron, dos en el interior de la casa y el tercero, en unos matorrales en los que se había ocultado tras escapar herido, desde el inmueble.