Los trabajadores del astillero de Asenav, de las plantas de Valdivia, Concepción y Puerto Montt, pusieron término a su conflicto laboral y ayer resolvieron volver a sus faenas, tras llegar a un acuerdo con la empresa, en materias económicas y de seguridad.
El presidente nacional del sindicato Héctor Silva, manifestó que si bien los ofrecimientos de la empresa no fueron del todo satisfactorios para el sindicato, se aproximaron a las demandas, especialmente en cuatro puntos específicos que hasta el pasado lunes no se habían logrado zanjar en el marco de la negociación colectiva y que fueron los que motivaron la huelga.
Sin embargo, tras una prolongada reunión el martes en la Inspección del Trabajo, con los ejecutivos del astillero encabezados por su gerente general Waldo Benavides, se llegó a un acuerdo final.
La empresa accedió a pagar un bono de término de conflicto por 150 mil pesos y no de 50 mil, como era su oferta anterior. También accedió a elevar a un 4 por ciento más el IPC, el reajuste automático de los sueldos, desde el 1 de julio.
En la negociación, la empresa no subía la oferta a patir de un 3,5 por ciento, aun cuando el sindicato había bajado sus pretensiones de un 10 a un 6 por ciento.
Además, los trabajadores obtuvieron ahora el compromiso del astillero, del pago de bonos trimestrales por producción, con un valor adicional por barcos construidos para empresas extranjeras.
SEGURIDAD
En relación a otro de los puntos considerados 'emblemáticos' en discusión durante la negociación y relativo a las seguridad y enfermedades profesionales, Héctor Silva señaló que hubo un compromiso de la empresa, de accionar medidas para trabajar en conjunto y garantizar más seguridad para evitar accidentes.
En este sentido, señaló que en el petitorio los trabajadores demandaban más atribuciones y facultades para los comités paritarios y los prevencionistas que se desempeñan al interior de los astilleros, así como programas de capacitación en esta materia.
La negociación colectiva entre el sindicato y la empresa se inició en mayo pasado, pero en cuatro puntos no se llegaba a un acuerdo entre las partes.
Silva, quien además es dirigente nacional de los trabajadores metalúrgicos, señaló que el pasado martes la reunión con el gerente Benavides y los ejecutivos Javier Sotomayor, gerente de administración; y Nicolás Nazal, administrador de finanzas, se desarrolló entre las 8.30 y 15 horas, tras lo cual salió 'humo blanco'.
Silva valoró la posición el sindicato y sus trabajadores, que asumieron y entendieron la posición de la empresa, en cuanto a no poder conceder más valores en sus ofrecimientos económicos.
El astillero se encuentra en la etapa final en la construcción de un barco de apoyo petrolero, que debía haber sido entregado a una empresa naviera de Dinamarca en febrero pasado y cuyo retraso, le significaría una cantidad importante de pérdidas diarias, aseguró el dirigente.