Es innegable que en nuestro país (16,7%) y región de Los Ríos (19%), nuestra población está envejeciendo y los datos que arroja la encuesta Casen así lo demuestran. En ese contexto, que por causas de carácter económico, social y personales, los adultos mayores día a día se insertan más en el mercado laboral y son contratados en variadas actividades, cada vez la calidad de vida, su salud les permite realizar tareas con altos grados de eficiencia en sus puestos de trabajo.
El perfil de los adultos mayores muestra que son más activos que pasivos en promedio, aportan con su experiencia, no necesitan en su mayoría de cuidados especiales, sus niveles educacionales son mayores (el 12% es técnico o universitario), ya no se asocia muchas veces vejez con enfermedades e inactividad.
El acceso al trabajo como asalariado ya se empina sobre el 27,6%, en este grupo etario, lo que equivale a 796.000 personas trabajando. Los expertos laborales de nuestro país cada vez referencian más que las empresas en la contratación en los niveles ejecutivos están dispuestas a contratar a personas mayores de 50 años, ya que la experiencia y la madurez laboral son intangibles altamente valorados en las organizaciones empresariales y no empresariales, se están dejando de lado los mitos que son personas más resistentes a los cambios, con menos interés en la educación continua. Al contrario, se evidencia en este grupo etario mucho interés por aprender nuevas tecnologías y sus usos, gracias a su experiencia están más dispuestos a enfrentar nuevos desafíos con más sabiduría y enfocados al logro de objetivos, se suman a los equipos de trabajo más jóvenes y se sienten a gusto trabajando con ellos.
Si consideramos que en nuestro país en el 2050, se calcula que habrá una población de seis millones de adultos mayores, los desafíos son relevantes. Por lo tanto, uno de estos desafíos es conciliar cómo mantener a los adultos mayores trabajando como opción de vida y no de supervivencia económica y dar espacio a los jóvenes para que se inserten en el mercado laboral, mejoramiento de sus pensiones, las coberturas de salud han aumentado en estos últimos 15 años se necesita profundizar el acceso en menos tiempo a tratamientos especializados. Una cifra para una reflexión futura, hoy 800 mil adultos mayores están trabajando.
Francisco Mena B.
Columna