El narcotraficante mexicano Joaquín "El Chapo" Guzmán, quien se encuentra prófugo, logró hacer llegar a EE.UU. toneladas de droga con submarinos, veleros e, incluso, a través de túneles cavados bajo la frontera con México. La información fue revelada por EFE, que tuvo acceso a los documentos de la justicia norteamericana.
Según los registros judiciales, en septiembre de 1995 se presentaron cargos por primera vez contra él y otros 22 individuos, a los que acusaron de lavado de dinero y de conspirar para transportar ocho toneladas de cocaína.
El tribunal ante el que el Gobierno de EE.UU. interpuso esta primera acusación fue la Corte del Distrito Sur de California, cerca de San Diego.
"Miembros de la organización de Guzmán construyeron un túnel de aproximadamente 20 metros de profundidad, que comenzaba en México y se extendía aproximadamente medio kilómetro a través de la frontera para acabar en Otay Mesa, California", recoge el escrito.
Otros tribunales estadounidenses, como la Corte del Distrito Este de Illinois, detallan que para transportar la droga los miembros del cartel de Sinaloa también usaban aviones de carga, ferrocarriles, coches, buques, botes de pesca, submarinos, lanchas, autobuses, remolques de tractores y camiones de transportistas internacionales.
Los miles de kilogramos de marihuana, cocaína, metanfetaminas y heroína que "El Chapo" hacía llegar a EE.UU. desde México procedían de países centroamericanos y sudamericanos, como Colombia, Ecuador, Venezuela, Perú, Panamá, Costa Rica, Honduras y Guatemala.
Para mover la droga a través del continente, los narcotraficantes utilizaban almacenes construidos en ciudades fronterizas, como la mexicana Tijuana, y luego transportaban poco a poco la droga a otros cobertizos en EE.UU., que servían de escondrijo hasta el momento de la venta.
"El Chapo" se valía de una "red de policía corrupta y contactos políticos" y "sicarios", encargados de asesinar, secuestrar y torturar para cobrar las cuentas pendientes de la droga.