Correo
Agradecimientos de diputado
Quiero agradecer por este medio a la Superintendencia de Servicios Sanitarios y particularmente a su director regional don Eric Loyola por la rápida respuesta a la denuncia hecha por quien suscribe y vecinos tras derrames de aguas servidas en la comuna de Panguipulli.
La oportuna intervención permitió constatar que efectivamente existían fallas en la planta elevadora, y en base a ello exigir a la empresa proveedora del servicio, las reparaciones y enmiendas, sin perjuicio del cierre del proceso sancionatorio, el cual también esperamos concluya a la brevedad.
Bernardo Berger Fett Diputado
Tarifa estudiante
El valor de $150 del pasaje estudiante en las micros, considerablemente menor que el de un adulto, es sin lugar a dudas una ayuda significativa para las familias de menos ingresos.
Sin embargo, existe un costo oculto que muchos resienten, los malos tratos que trae aparejado para algunos estudiantes el pago de esta tarifa por parte de, debemos ser justos, unos pocos choferes. Humillaciones como lanzarles el vuelto cuando pagan con $500 o $1000, revisar sus pases durante largo tiempo o interrogarlos acerca del objeto de su viaje, mellan la autoestima de los más retraídos y se convierten en una preocupación extra a la carga académica, la distancia que los separa de sus familias, y el costo económico de estar lejos de sus casas.
Nuestra ciudad vive del turismo en verano y se llena de vida desde marzo a diciembre gracias a los estudiantes, por tal motivo es deber de todos nosotros, los valdivianos, entregarles un trato digno a quienes nos eligen y que nos enorgullecen con la distinción de ser la primera Ciudad Universitaria y del Conocimiento de Chile.
Mónica Jara Pérez Directora Escuela de Liderazgo U. San Sebastián Sede Valdivia
Café Palace
Me parece inconcebible que el señor Jaime Farriol Ergas aparezca en el diario como empresario conciente. Eso de que va abrir el nuevo Palace con la mayoría del personal antiguo, no lo creo y conduce a una confusión para los clientes tanto antiguos como nuevos, ya que todo el personal antiguo fue humillado y menoscabado por tantos meses que tuvieron que llegar a la justicia para que se les pudieran pagar algo de los que les correspondía.
Ahora este señor aparece como si no hubiera pasado nada. ¿Dónde estuvo todo ese tiempo que no dio la cara ni una respuesta a esas personas? Ese personal antiguo a que se refiere es personal que recibió durante su administración como part time sin contrato.
Un saludo a todo el personal, a las once personas quienes apoyados por el abogado Sr. Claudio Márquez lograron revertir su incómoda situación.
Pablo Eliecer paecafu@hotmail.com
Patricio Aylwin
Si todos destacan las cualidades de un gran político como fue el ex Presidente Aylwin ¿por qué no siguen su ejemplo? Me refiero a la clase política que hoy está tan cuestionada y que está lejos de ser el modelo que hoy valora el país entero en la figura de Aylwin.
Hoy algunos de nuestros políticos locales que se supone nos representan, están cuestionados en casos como Penta, en el caso de la senadora Von Baer o bien, otros viajan y viajan al extranjero como si eso ayudara al desarrollo real de nuestra región, como el diputado Flores. Al menos yo creo que ello no contribuye y no han sido electos para acumular kilómetros en encuentros que poco ayudan a la región o al país. Menos ahora, que el horno no está para bollos.
De los partidos políticos, poco o nada que decir. Sólo se preocupan de las elecciones pero de propuestas de ambos lados, nada.
Angélica Hormazábal Mena
El último político
Restablecer la política, el diálogo, es una tarea difícil en un contexto donde predomina la noción de que no hay adversarios sino enemigos. Lo que algunos ven como claudicación, falta de convicción o traición por parte de Aylwin, en realidad fue la demostración de que en política, el medir los efectos de los actos y decisiones, debe primar sobre la demagogia y la simple convicción.
Aylwin demostró su alta vocación política, esa mezcla entre pasión y mesura, en la forma en que contribuyó a terminar con la dictadura de Pinochet. Ese fue quizás el principal desafío en su vida y lo trató de cumplir de una manera responsable: evitando más derramamientos de sangre. Conforme a sus convicciones y experiencia, tenía claro que la violencia no sería la forma de volver a una democracia. En tiempos donde prolifera el simple voluntarismo con forma de retroexcavadora, con la arrogancia de aquellos que desde la comodidad del presente se presumen jueces morales de la historia, o que juegan a ser revolucionarios que van a extirpar los males del mundo, la figura de Aylwin debería recordarnos lo que implica tener verdadera vocación política, esa mezcla entre convicción y responsabilidad.
Jorge Gómez Arismendi jorgegomezarismendi@gmail.com