En una cita que podría descomprimir el ambiente tras la radicalización de las manifestaciones que se han concentrado en Chiloé por la crisis derivada de la marea roja, el ministro de Economía, Luis Céspedes, entregaría ayer una propuesta para mejorar la ayuda económica a agrupaciones de extractores de moluscos y pescadores artesanales.
Los trabajadores esperaban que el bono que dispuso el Gobierno, de $ 100 mil, se eleve al menos a $ 400 mil ante la emergencia provocada por el fenómeno natural.
La Moneda ofreció ese pago -además de la entrega de abarrotes- durante los meses que se extienda la situación que impide sacar moluscos desde las zonas afectadas y afecta el tejido productivo de la zona. Las protestas han dejado a la isla sin conectividad con el continente y en las comunas de Castro, Quellón y Ancud ya no queda bencina para la movilización particular y solo se mantienen reservas para los vehículos de emergencia.
Buena voluntad
Los dirigentes de la provincia de Chiloé despejaron una de las vías de ingreso a la zona, que mantienen desde hace cinco días, y en Pargua, en la comuna de Calbuco, permitieron la normalización del servicio de transbordadores por algunas horas, en una petición realizada por las autoridades mientras se desarrollaba el diálogo entre las partes.
Sin embargo, la Ruta 5 seguía a última hora de ayer interrumpida en el sector de Maullín.
Los afectados por el fenómeno natural piden también que organismos autónomos realicen estudios que determinen si la disposición de toneladas de salmones muertos en las aguas de la zona pudo haber contaminado el mar, aunque expertos de distintas entidades han rechazado alguna relación.
"Chiloé está en alerta y nadie se va a bajar de la calle, aunque haya heridos. Estamos decididos a luchar y si algo pasa, va a ser responsabilidad del Gobierno que no ha querido dialogar. Nosotros no somos intransigentes, queremos conversar", dijo la presidenta de la Agrupación de Mujeres de Pescadores Artesanales de la zona, Denise Alvarado.
Cita en la moneda
Varios alcaldes de Chiloé que llegaron ayer hasta La Moneda para sostener una reunión con el ministro del Interior, Jorge Burgos, en la que se mostraron optimistas respecto de la posibilidad de un acuerdo entre los pescadores y el Ejecutivo.
Los jefes comunales traspasaron al jefe de gabinete la preocupación de los habitantes por reconvertir el modelo de desarrollo de Chiloé que se basa en la extracción de mariscos, recurso que hoy se encuentra contaminado por la marea roja.
En esta línea, el senador Rabindranath Quinteros (PS) dio que "el cambio climático y la marea roja llegaron para quedarse, hay que reconvertir actividades".
El Sernapesca y la Seremi de Salud de Los Lagos decidieron ayer levantar la prohibición de extracción de mariscos en las zonas de Calbuco Norte e Isla Huar. La medida tiene relación con el programa de monitoreo desde el inicio de la marea roja.
Según las autoridades de salud de la Región de Los Lagos, desde el inicio del evento natural solo se han presentado 10 casos de intoxicaciones -todas leves- en las distintas zonas afectadas.
Advierten por posible falta de productos
El presidente de la Cámara de Comercio de Castro, Julio Candia, advirtió que el bloqueo de la rutas podría hacer que, en los próximos días, comiencen a escasear los productor básicos. "Según algunos comerciantes, piensan que pueden llegar hasta mañana (hoy) en el caso de los supermercados. A lo mejor los locales más pequeños podrían tener para unos días más (artículos perecibles)", dijo a radio Cooperativa.
"A medida que pasan los días esto se va a poner peor (...) el tema a largo plazo es ver una diversificación de los pescadores artesanales".
Felipe Sandoval, Presidente de SalmonChile
$ 400 mil es el monto que los afectados por la marea roja esperaban conseguir del Gobierno en la cita de ayer.