Como lo ha hecho durante toda su estadía en Suecia, la Presidenta Michelle Bachelet abordó otro de los temas complejos que aquejan a su administración. Esta vez, se refirió al rechazo del TC a dos de los aspectos centrales de la reforma laboral, proyecto que a su juicio permitirá reducir la desigualdad entre ricos y pobres en Chile.
Durante el encuentro que sostuvo ayer con la comunidad chilena residente en la capital del país escandinavo, la Mandataria señaló que "cuando nosotros vemos la desigualdad en Chile, parte muy importante es por la diferencia tremenda entre los ingresos autónomos de los trabajadores".
"Todas las políticas sociales ayudan a que esa diferencia entre los más ricos y los más pobres se disminuya, pero el problema tiene que ver con los ingresos de los más ricos y los más pobres", explicó. En esa línea, Bachelet subrayó que "parte importante de esa dificultad de ingreso es por sindicatos débiles, con pocas capacidades de negociar, y por eso es que la reforma laboral lo que buscaba era fortalecer nuestros sindicatos, para que pudieran negociar en buenas condiciones, tanto salarios como otras condiciones laborales". "Lamentablemente, ustedes sabrán que el Tribunal Constitucional consideró inconstitucional algunos aspectos claves, como el de la titularidad sindical. Nosotros hemos enviado un veto al Congreso y además vamos a enviar una Ley Corta para mirar cómo sacamos alguna cantidad de cosas que hoy día creemos que son esenciales para poder avanzar hacia trabajadores con mejores condiciones laborales", recalcó.
En ese contexto, la jefa de Estado Indicó que "yo creo que una sociedad moderna no puede ser solamente una sociedad que crece económicamente, donde sus trabajadores tienen condiciones salariales y laborales precarias. Y por eso que para nosotros es un gran compromiso también con nuestros sindicatos y nuestros trabajadores de Chile".
Apoyo al Global Deal
Mas tarde, la gobernante reforzó el punto en el edificio del Ministerio de Relaciones Exteriores de Suecia, durante su participación en una conversación sobre el "Global Deal", iniciativa presentada por el Primer Ministro sueco Stefan Löfven en la Asamblea General de la ONU en 2015, que busca mejorar el diálogo entre las contrapartes del mercado laboral y el Gobierno, además de las condiciones de contratación y la productividad. En esa actividad, Bachelet señaló que esta discusión "es oportuna, actualmente estamos en medio de un debate el Congreso chileno sobre las nuevas reformas laborales, que es parte de un diálogo más amplio que está teniendo lugar en nuestra sociedad".
Del mismo modo, agregó que "nuestra respuesta ha sido priorizar una agenda basada en los mismos principios que la iniciativa 'Global Deal'. El crecimiento económico por sí solo no va a reducir las brechas de desigualdad; más bien, debemos desplegar con eficacia y decisión una serie de herramientas".
"El trabajo digno es la piedra angular"
"La alternativa no es aceptable, un crecimiento limitado, disminución de la creación de nuevos y mejores empleos, menor productividad y más descontento entre los ciudadanos. El trabajo decente juega un papel esencial en esta agenda", enfatizó Bachelet. Finalmente, la Presidenta dijo que "el trabajo digno es la piedra angular sobre la que construimos bienestar. No sólo porque proporciona una oportunidad de ganar un mejor ingreso, sino porque puede fortalecer la vida de las personas, sus familias y sus comunidades. Esto, a su vez, permite el desarrollo económico y social".