Frases
"Estaban conscientes de que el combustible que tenían no era el adecuado ni era suficiente".
Coronel Freddy Bonilla
"Los jugadores han avanzado, están más maduros, están agarrando más experiencia".
Capitán Nicolás Massú
"Estaban conscientes de que el combustible que tenían no era el adecuado ni era suficiente".
Coronel Freddy Bonilla
"Los jugadores han avanzado, están más maduros, están agarrando más experiencia".
Capitán Nicolás Massú
Pocos deben ser los asuntos que crucen más transversalmente la preocupación creciente de la comunidad internacional que el cambio climático. Y, al parecer, por fin los humanos estamos tomando conciencia para comprometer medidas que permitan asegurar un poco más la sustentabilidad de la vida en el planeta.
Lamentablemente damos valor a nuestros bienes tangibles o intangibles, cuando nos damos cuenta que lo que tuvimos en abundancia lo estamos perdiendo o lo hemos perdido, y ello frecuentemente ocurre en todos los campos: en lo económico, laboral, social y también en lo sentimental. ¡¡ Así funcionamos!!... Parece que es condición del ser humano reaccionar de esa manera. Lo que abunda no lo valoramos y cuando lo perdemos se transforma en un bien escaso y por tanto adquiere un mayor o un inalcanzable valor.
Cuando estamos "fregados" nos acordamos de Dios, de la familia, de los amigos y de los valores verdaderos y profundos de ser humanos, y vivir con gozo el único planeta azul y verde del Sistema Solar y que es nuestra única casa posible. En nuestro caso, si no hay casa, no hay vida posible y esta casa se está desmoronando mucho más rápido y más gravemente de lo que suponemos o tenemos en cuenta.
Los datos más duros y recientes indican que la pérdida del agua y suelo fértil, o que la radiación, o que la resiliencia de acontecimientos catastróficos originados por los cambios del clima o por los fenómenos telúricos o volcánicos, están poniendo a prueba, o en jaque la capacidad humana de cuidar su subsistencia, siendo condición obligatoria para ello que el humano se ocupe de la supervivencia y equilibrio de sus hermanos de ruta de origen animal o vegetal, todos completamente obligados a sustentarse mutuamente.
El problema es que ni los gobernantes, ni los políticos, ni los empresarios, ni los dirigentes sociales, ni la comunidad, hablamos con claridad respecto de que la más evidente destrucción "no es matemática ni lineal". La destrucción de nuestro planeta de nuestra única casa, está comenzando a ser exponencial, o sea cada vez más veloz y cada vez más intensa.
En mi próxima columna comentaré sobre lo que está comenzando a aparecer como la única esperanza posible.
Iván Flores García
Diputado
Quedan pocas dudas acerca de lo efectivo que ha terminado por resultar el aprendizaje de los chilenos para responder frente a los episodios de emergencias que frecuentemente debemos enfrentar y que, por el momento, quedó constituido por el terremoto con epicentro en Chiloé del domingo último, que también demandó respuestas en Los Ríos.
Fueron 450 habitantes del sector costero las que debieron abandonar sus viviendas u ocupaciones cuando surgió la alarma de tsunami y una importante cantidad de personas vio interrumpidos sus planes de llegar o salir del territorio amagado, porque se ordenó la suspensión del servicio de traslado de pasajeros a través de la bahía de Corral.
Afortunadamente, la preocupación inicial se convirtió en tranquilidad con el pasar de las horas, a medida que se comprobaba que en la región no había pasado nada más alarmante que el comprensible temor que el movimiento sísmico navideño provocó en la población.
Entonces, lo que queda es la comprobación de nuestra gente ha colaborado con creces a los esfuerzos oficiales por constituir una cultura capaz de aminorar los efectos de las catástrofes. Las indicaciones se respetan, los protocolos son debidamente tomados en cuenta y la disposición a privilegiar el bien común frente a los intereses personales ya no son temas a discutir. A golpes de la naturaleza, parece hemos ido aprendiendo a hacer lo más conveniente, a prevenir antes que a curar.
Quedan algunas incertidumbres acerca de lo que podría ocurrir ante una catástrofe de mayor magnitud con aquellos que mostraron lo peor de nuestra sociedad en los saqueos y desmanes posteriores al cataclismo de febrero de 2010, pero lo importante es que el grueso de la población demuestra conciencia e interés por sumar si es necesario.
Lo dijeron algunos adultos mayores, testigos de mayo de 1960, al resaltar que cualquier tarea destinada a la prevención -lo que no se vio en ese duro momento- resulta de gran importancia para seguir adelante en un suelo tan inestable como el nuestro.
La empresa Astilleros y Servicios Navales de Valdivia tiene comprometida la construcción de cuatro grandes embarcaciones de pesca para el próximo año y esto ha significado que levante un nuevo galpón para el trabajo de los técnicos y profesionales. Los demás astilleros de la ciudad también verán multiplicado su trabajo, lo cual hace augurar un buen año 1987.
Representantes de todas las iglesias evangélicas que funcionan en la zona se reunirán hoy en la iglesia Bautista El Redentor, para formar la Unidad Evangélica de Valdivia, que busca coordinar acciones conjuntas. Según explicó el pastor Sergio Teneo, esta organización existe en todo el país, pero en la zona aún faltaba conformarla, para tener una voz común .
El académico de la Universidad Austral de Chile José Escaida, quien dirigió el estudio de la Uach sobre la viabilidad de crear una nueva región, dijo que es aconsejable instalar seremías en comunas, para así evitar que la región centralice el poder y las decidiones en Valdivia. También pidió concurso público para la designación de las futuras autoridades locales.