Pablo Quintana Villanueva
Durante los dos días que permaneció en Valdivia, la candidata presidencial del Frente Amplio Beatriz Sánchez visitó algunos locales de votación del plebiscito convocado por la coordinadora No + AFP, se reunió privadamente con el rector de la Universidad Austral de Chile, Óscar Galindo, y participó en una cena de recaudación de fondos para la campaña que busca llevarla a La Moneda.
Dentro de esa apretada programación, ayer se dio tiempo para responder algunas consultas sobre la contingencia nacional a Diarioaustral de Los Ríos, entre ellas, la baja de 16 a 13 puntos en la encuesta Plaza Pública Cadem, la misma que sitúa 10 unidades más arriba a su contendor de la Nueva Mayoría, Alejandro Guillier.
"Hay que poner las cosas en contexto, porque además de Cadem hay otras dos encuestas en las que se indica que paso a segunda vuelta. No es que disminuya el valor de Cadem, pero yo pongo todas las cosas en perspectiva. Ahora bien, tengo la convicción de que si votan muchas personas, yo paso a segunda vuelta", aseguró.
¿Cuál es su postura respecto del anuncio hecho por la Presidenta de la República de aumentar el gasto público en el Presupuesto para 2018?
-Creo que el Estado debió haber tomado esa medida mucho antes. Si algo hemos de criticar al actual Gobierno, es cómo se mantuvo como mero espectador respecto a lo que pasaba con una economía que no se reactivaba, debiendo haber hecho mucho más. El Gobierno se quedó detrás de una vitrina contemplando la reacción de los privados, cuando pudo haber incentivado mucho más. Es un poquito tarde, sobre todo pensando en los meses que quedan de mandato.
Pasemos a un tema delicado. Se le ha criticado desde muchos sectores el respaldar la decisión del Gobierno de recalificar la querella contra los comuneros en huelga de hambre.
-Lo sé, pero éste es un tema que tiene varias aristas. En lo concreto, la ley antiterrorista es absolutamente ineficiente, porque de 100 imputados ha habido sólo un condenado; además, es rechazada por todos los organismos internacionales de derechos humanos, porque no ajusta a los estándares de esta clase de normas. Creo que los países deben tener leyes contra el terrorismo, pero deben obedecer a una fórmula moderna; la nuestra viene de la dictadura y responde a una intención de perseguir la disidencia. Seguir aplicándola con la misma receta de los últimos 20 años, es garantizar de algún modo que siga sucediendo lo mismo en los próximos 5, 10 ó 15 años.
¿Hay violencia en la zona de conflicto entre el Estado y el pueblo mapuche? Sí, claro que la hay y se debe perseguir judicialmente. El problema es que hoy no están las herramientas para que se acabe, porque pareciera que hay muchos atentados y que nadie llega a ser condenado por ello.
Falta, entonces, potenciar la inteligencia policial y hacer un trabajo más dedicado; aunque la solución pasa por el diálogo. Aquí yo tomo lo que han propuesto otras personas que ni siquiera pertenecen al Frente Amplio, como el ex intendente de La Araucanía Francisco Huenchumilla. Él promovía sentar a la mesa a todos los representantes de las áreas involucradas en el conflicto, y empezar un diálogo impulsado desde el Estado, pero en la zona, para ir llegando a ciertos acuerdos y por ende, a posibles grados de solución.
Dentro de su visita a Valdivia, acudió a algunos locales de votación para el plebiscito nacional convocado por la coordinadora No + AFP. ¿Qué le ha parecido esta iniciativa?
-La coordinadora No + AFP ha hecho un ejercicio muy valioso, porque como organización social muy potente se instalaron en todas las regiones del país y lideraron las protestas más grandes que hemos visto después del movimiento estudiantil, para enarbolar la consigna de rechazar el actual sistema previsional. No solamente se quedaron en eso, sino que además dijeron: "Vamos a proponer un sistema" y lo hicieron, y valoro que fueran aún más allá para someterse a una consulta nacional.
Hacer un plebiscito es complejo, porque era decir sí o no a algo que ellos vienen trabajando hace más de 10 años, y enfrentaron a la ciudadanía y la ciudadanía respondió en masa. El pueblo chileno se manifestó claramente y ha optado por un sistema de reparto tripartito, que nosotros suscribimos y que está pensado de aquí a 100 años, para tranquilidad de todos.
Usted ha emplazado a los demás aspirantes a La Moneda a que sean transparentes en cuanto a lo que pretenden gastar en sus programas de gobierno. ¿Cuál es el costo que tiene su propuesta y cómo será financiada?
-Efectivamente, yo he pedido transparencia frente a este punto y nosotros tenemos un compromiso: este mes vamos a dar a conocer cuánto va a costar nuestro programa y cómo lo financiaremos. Hay un equipo especialista en temas tributarios y económicos que está proyectando los costos.
Ahora bien, respecto al cómo, hemos anunciado la justicia tributaria, porque queremos que se distribuya mejor la riqueza en Chile y que los más ricos paguen lo que corresponda. De ahí sale la idea del impuesto a los súper ricos, lo que afectaría al 0,7% de las familias de Chile y nos permitiría recaudar entre 4 mil 500 y 6 mil millones de dólares anualmente.
Descentralización real de regiones
Respecto de si debe otorgarse más autonomía a las regiones, Beatriz Sánchez afirmó que "no hay democracia sin descentralización, pero ésta no consiste sólo en generar más regiones o comunas, sino en promover -por ejemplo- que las personas de cada región elijan a su gobernador regional y que éste cuente con una capacidad de maniobra financiera, con impuestos locales. Tiene que haber descentralización real desde el gobierno local al regional".
