Descentralización: lecciones de las experiencias de Perú y Colombia
MEDIDAS. El doctor en Ciencia Política Egon Montecinos explicó que la elección de gobernadores regionales implican democratización, pero que la descentralización requiere de medidas más profundas, como una transferencia gradual de competencias asociada a capacidad técnica.
El proyecto que regula la elección de gobernadores regionales está en segundo trámite constitucional en el Senado, mientras que el proyecto de ley relativo al fortalecimiento de la regionalización del país, que traspasa competencias a la nueva figura que reemplazará al intendente, ingresó a Comisión Mixta por rechazo de modificaciones. Esta iniciativa constituye un avance hacia un modelo de estado unitario descentralizado e implica desafíos para el país a la luz de experiencias internacionales, como las de Perú y Colombia, donde si bien se logró mayor democratización aún se observa una fuerte presencia del nivel central en las decisiones relativas a la inversión.
Así lo indicó el doctor en Ciencia Política e investigador del Centro de Estudios Regionales y Políticas Públicas (CEDER) de la Universidad de Los Lagos, Egon Montecinos, quien sostuvo que Chile puede sacar lecciones en virtud de las ventajas y desventajas de la descentralización, en la práctica, en base a esas experiencias.
Ventajas
¿Qué es lo positivo de esos ejemplos? Montecinos explicó que en el caso de Perú, "el diseño institucional, las leyes y las reglas del juego que se crearon recogen el espíritu de la descentralización, que las planificaciones regionales, provinciales y locales deben estar articuladas, que deben hacerse de manera participativa y el proceso debe ser gradual".
El diseño participativo -sostuvo- también se observó en el modelo impulsado por Colombia. "Lo positivo de esta experiencia es que establece incentivos para relacionarse entre las regiones, lo que Perú no pudo lograr. Además, definió un buen marco normativo", afirmó.
Sin embargo, apuntó a que esos procesos, "como yo lo interpreto, se concentraron mucho en lo normativo y poco en la implementación práctica".
Transferencia gradual
Colombia tiene 32 departamentos (regiones), una Constitución que define mecanismos participativos y es un país que -a juicio de Montecinos- ha avanzado en descentralización, pero que también ha retrocedido. "Uno puede observar que hoy día el gran problema que ven los colombianos es que se sigue sosteniendo una presencia del nivel central en el predominio de la inversión en los departamentos, o sea, sigue siendo más importante la inversión de un ministerio que la propia inversión del gobierno regional", explicó.
En esa línea, dijo que existe una sobreposición de los instrumentos de planificación en el territorio, la que -planteó- se ve con preocupación, ya que "finalmente un gobernador que posee legitimidad democrática tiene el derecho a modificar su instrumento rector de planificación". Pero -indicó- la población valora mucho más aquel instrumento que planifica el territorio y que, a la vez, tiene un presupuesto para resolver los problemas que se identifican.
En ese contexto, Montecinos planteó que ello exige "que la transferencia de competencias tiene que ir de la mano de, a lo menos, responsabilidad en la ejecución del gasto". Advirtió que esto no significa que los gobernadores regionales -en Chile- tengan la responsabilidad fiscal y política, por ejemplo, del ciento por ciento del gasto del Ministerio de Obras Públicas en la región, "porque el gobierno regional no tiene la capacidad instalada para gestionar y administrar 110 mil millones de pesos además de los 50 mil millones de pesos que ya administra el gore".
Explicó que "cuando se habla de capacidad instalada, en la práctica significa que si le transfiero los recursos del Mop y no la capacidad humana, técnica y preparada para administrar esos fondos voy a estar condenado a cierto grado de fracaso ".
Lo anterior -dijo- se observa en Perú, el que tiene 24 departamentos y una provincia constitucional. Afirmó que si bien existe una mayor articulación de los instrumentos de planificación, también presenta predominio del nivel central en las decisiones.
Frente a esas experiencias, Montecinos afirmó que el modelo a instalar en Chile a raíz de la elección del gobernador regional debe considerar una transferencia gradual de la trasferencia de competencias. "Uno deduce de las recomendaciones que hacen investigadores de Colombia y Perú, a partir de la experiencia, que efectivamente se debe avanzar de manera gradual, pero profunda".
En ese contexto, dijo que en Chile "a lo menos en uno o dos períodos los gobernadores regionales administren lo que actualmente administran los intendentes designados, que principalmente es el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR)".
Asimismo, indicó que "hay una propuesta que me la planteó en su momento Jaime Tohá (ex intendente del Bío Bío), quien sostenía que el proceso de descentralización considere que las nuevas autoridades electas tengan capacidad sobre la ejecución de un determinado porcentaje de recursos de algunos ministerios".
El académico de la Universidad de Los Lagos planteó también que no hay razón para transferir las mismas competencias a todos los gobiernos regionales de Chile, "muy por el contrario, en Perú plantean que las transferencias deben ser heterogéneas, diferenciadas, porque no todos los gobiernos regionales tienen las mismas capacidades para administrar recursos de un determinado sector. No todas las regiones requieren lo mismo, por lo tanto no todas pueden avanzar al mismo ritmo".
Acerca de las críticas formuladas por la oposición respecto de que el proyecto de ley presentado por el Ejecutivo en Chile no incluía trasferencia de competencias, Montecinos sostuvo que "estoy convencido de que ese argumento fue usado para trabar el proyecto de democratización, creo que fue para que la elección no se hiciera este año; ahora, también puede ser que haya habido algún parlamentario que, efectivamente, quiera que se avance de manera paralela en los tres ámbitos, porque las reformas en descentralización en América Latina tienen tres áreas, una administrativa, una política y una fiscal".
Aprendizajes
Montecinos planteó que la gradualidad en la descentralización debe estar asociada también a la decisión política respecto del uso de los recursos, pero no a la responsabilidad fiscal de ese gasto.
Esto último -dijo- implica sumar otras medidas para evitar, por ejemplo, cuestionamientos de Contraloría, como ocurrió en Perú, donde al menos 15 gobernadores son investigados por eventual corrupción.
Esas medidas son acreditar que la competencia transferida se puede cumplir, es decir, crear una especie de consejo nacional o regional de acreditación; transferir, además de los recursos, la capacidad técnica al gobierno regional o inyectar recursos a éste desde el nivel central para contratar personal técnico, y mejorar los mecanismos de control interno del gasto.
Respecto de este último, afirmó que "somos el país que más atrás va en democratización, pero somos el que más ha avanzado en materia de control del gasto y de responsabilidad fiscal en América Latina".
Montecinos expuso en Colombia
Egon Montecinos, ex intendente de Los Ríos, participó la semana pasada en el XII Congreso Iberoamericano de Municipalistas en Manizales, Colombia. Allí expuso el modelo de presupuesto participativo en seis países de América Latina con énfasis en el Fril impulsado en Los Ríos. "Chile no se caracteriza ni es reconocido por experiencias innovadoras en materia de democracia participativa, de ahí que mostrar la experiencia de participación desarrollada a nivel regional resulta relevante para evaluar las condiciones bajo las cuales se desarrollan y las ventajas y debilidades que ha tenido el proceso en nuestra región", sostuvo.
"Que se elija al gobernador regional no significa que se descentralice, sino que se democratiza un nivel de gobierno". "Somos el país que más ha avanzado en materia de control del gasto y de responsabilidad fiscal en América Latina".
Egon Montecinos, Investigador CEDER"