EFE
E l presidente de Argentina, Mauricio Macri, anunció ayer medidas de recorte en el Gobierno nacional que supondrán el despido de 1.000 funcionarios y la paralización de los salarios de otros 500, una decisión con la que dijo querer dar "un ejemplo de austeridad".
"La austeridad tiene que partir de la política, ese lugar en el que, durante mucho tiempo, los que tenían que entender el poder como un servicio estaban más preocupados por beneficiarse a sí mismos que por cuidarnos", declaró el mandatario. Macri realizó el anuncio en un acto realizado en la Casa Rosada, la sede del Ejecutivo, en Buenos Aires.
Recién llegado de una gira internacional que lo ha llevado por Rusia, Suiza y Francia, Macri reveló la puesta en marcha de tres medidas de ajuste que afectarán en distintos sentidos a la estructura del Gobierno federal argentino. El recorte más fuerte estará dirigido a los cargos políticos, ya que se reducirán en 25 %. Eso supondrá cerca de 1.000 despidos y "un ahorro" de 1.500 millones de pesos (unos US$ 75 millones).
Macri comunicó también que, en todo 2018, no habrá negociaciones salariales para los funcionarios con puestos políticos. Como resultado de esta medida, el sueldo de estos cargos no aumentará en un año en el que el Ejecutivo marcó una meta de inflación del 15 %.
El último anuncio del Presidente fue que próximamente firmará un decreto para que ningún ministro pueda tener familiares dentro del Gobierno, algo que, admitió, le da "mucha pena" porque va a perder colaboradores "muy valiosos". Sin embargo, reiteró que está en línea con su idea de lograr "un país más transparente". "Si los argentinos están haciendo su aporte, quienes somos parte de la política tenemos que redoblar el esfuerzo y dar el ejemplo", por lo que invitó a las administraciones públicas de todo el país a "tomar medidas similares", agregó Macri.
Polémica previa
Los anuncios de Macri se producen tras una polémica despertada, en los últimos días, en torno al ministro de Trabajo, Jorge Triaca. Esto, después de que se filtrara un audio en el que se le escucha insultar a una exempleada doméstica, quien aseguró haber trabajado de forma irregular para su familia entre los años 2012 y 2015. La exempleada del titular de Trabajo relató que, para compensar la negativa a un aumento de sueldo, el ministro le consiguió un puesto en el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), a lo que se que las dos hermanas de Triaca, Mariana y Lorena, y su esposa, María Cecilia Loccisano, ostentan altos cargos en el Estado.
REACCIONES
La Asociación de los Trabajadores del Estado (ATE), uno de los mayores sindicatos de funcionarios, dijo que los recortes "parecen una tomadura de pelo"., Silvia León, las medidas "no tienen un impacto real en el Estado" y consideró que la congelación de los salarios es algo "demagógico" porque, durante los dos años de Gobierno de Macri, estos funcionarios han cobrado unos sueldos "exorbitantes".
Pablo Micheli, secretario general de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA) Autónoma, apuntó que estas medidas sirven para "mejorar la imagen" del Ejecutivo pero que, a la hora de concretarlas, "quedan en el olvido". "Estamos acostumbrados a anuncios importantes como mejoras en la calidad del trabajo o cómo terminar con la pobreza en la Argentina", pero "después no se concretan", dijo.
"Un Estado más ágil"
Macri destacó que busca crear "estructuras nuevas" que ayuden a tener "un Estado más ágil, más atento, más preparado" y alejado del que se encontró cuando llegó al poder, el que, en su opinión, era "una maraña burocrática", "demasiado vertical" y "jerárquica". Silvia León, secretaria de Organización del Consejo Directivo Nacional de la ATE, dijo que las marchas para reclamar mejoras en los derechos laborales continuarán y avisó que a comienzos de febrero se reunirán lpara planear un paro nacional junto a otros grupos.