El nuevo secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, amenazó ayer desde Arabia Saudita, el principal socio de Washington en la región árabe y máximo rival de Irán, con romper el acuerdo nuclear con las autoridades de Teherán.
En el segundo día de su visita en Riad, Pompeo arremetió contra Irán y el acuerdo firmado en 2015 por el Gobierno del ex Presidente estadounidense Barack Obama, un pacto que consideró que "ha fallado" en el propósito de "moderar" el régimen iraní, al que acusó de "desestabilizar toda la región".
"Irán solo se ha comportado peor en muchas áreas desde la firma del acuerdo", dijo Pompeo durante una breve declaración a la prensa, al lado de su homólogo saudita, Adel al Yubeir.
El "Halcón" aseguró que EE.UU. trabajará con sus socios europeos para "readecuar" el acuerdo nuclear y manifestó que, "si no es posible" alcanzar un nuevo pacto, el Gobierno de Donald Trump se retirará del mismo.
Críticas al pacto
Trump planea anunciar si sigue en el acuerdo antes del 12 de mayo, fecha en la que tiene que informar al Congreso estadounidense sobre el grado de cumplimiento del pacto nuclear que Irán suscribió con Reino Unido, Francia, China, Rusia y Alemania, además de EE.UU..
El Presidente estadounidense se ha mostrado siempre muy crítico con el texto firmado por Obama, especialmente porque no regula el uso de misiles balísticos por parte de Teherán.
"Al contrario que la Administración anterior, no descuidaremos el apoyo al terrorismo de amplio alcance de Irán. Es de hecho el mayor sostén del terrorismo en el mundo. Y estamos decididos a asegurar que nunca posee un arma nuclear", manifestó Pompeo.
Seguridad saudita
El ex director de la CIA, confirmado en su cargo por el Senado este viernes, recriminó en concreto a Teherán su apoyo al "régimen asesino" del Presidente sirio, Bachar al Asad y a la milicia hutí del Yemen, enemiga de Arabia Saudita.
En su intervención, Pompeo se refirió especialmente al caso del Yemen, país en el que Arabia Saudí lidera una coalición militar árabe contra los hutíes apoyados por Teherán y que, en los últimos meses, han lanzado varios misiles balísticos contra territorio saudí.
Pompeo aseguró que, para Washington, es una "prioridad" la seguridad de Arabia Saudita, a la vez que reiteró su apoyo militar al reino ultraconservador y alabó el programa de reformas que está llevando a cabo Riad, que, según él, "promueve la tolerancia" y "empodera a las mujeres".
Terrorismo
No obstante, Pompeo aludió a un discurso pronunciado por Trump en Riad el año pasado, durante una cumbre con mandatarios de todos los países musulmanes, en el que invitó a los países de Medio Oriente a tomar un papel activo en la lucha contra el terrorismo.
"Las naciones de Oriente Medio no pueden esperar a que EE.UU. aplaste el terrorismo por ellas. Tienen que tomar parte de esa carga", afirmó.
En el mismo acto, el ministro saudí reclamó que se impongan más sanciones a Irán "por su apoyo al terrorismo" y que se intensifique la inspección de las instalaciones nucleares iraníes.
Al Yubeir afirmó que Arabia Saudí "apoya la visión" de Trump en relación a Irán y aseguró que ambos países "coinciden" en sus puntos de vista en relación a la solución al problema iraní.
Esta solución, según reveló el pasado miércoles el Presidente de Francia, Emmanuel Macron, después de reunirse con Trump en Washington, iría por terminar el acuerdo nuclear "por razones internas".
Primera gira
En su primer viaje internacional, Pompeo empezó en Riad una gira de tres días a Medio Oriente, la que continuó ayer en Israel, y hoy visitará Jordania.
En Riad fue recibido por el rey Salman bin Abdelaziz y, a su llegada a Tel Aviv, el otro gran enemigo de Irán, fue recibido por el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
En una conferencia de prensa conjunta, ambos reafirmaron su compromiso para "detener" el poder de Irán.