El diputado Urrutia
El pasado lunes 18 la Corte de Apelaciones de Valparaíso acogió una solicitud de desafuero del diputado Ignacio Urrutia, a causa de que en abril de este año expresara que los vejados por la dictadura militar serían "terroristas" (incluyendo por obviedad quienes no tuvieron la suerte de sobrevivir a ella). Esto le valió el rechazo transversal, desde una indignada diputada Pamela Jiles, pasando por la oposición, hasta el gobierno en sus principales voceros…no en vano existen los informes Rettig, Valech I y II.
Es bueno recordar al respecto la contundencia de Patricia Verdugo en "Quemados vivos" (1986), "Caravana de la Muerte: pruebas a la vista" (2000), y ese escrito estremecedor suyo que es "Los zarpazos del Puma" (1989), estela que ha seguido Javier Rebolledo con "La danza de los cuervos" (2012), solo por mencionar una obra. Ellos son autores que desde la formación periodística han arremetido la investigación de la verdad, con rigor, acuciosidad y pulcritud, dejando patente el grado de infamia de los criminales. Ellos entregaron honradamente a la conciencia nacional resultados macizos, evidenciando al verdadero terrorismo, vale decir, el terrorismo dictatorial. Por ello, con la voz de Patricia Verdugo debemos reiterarlo: ¡las pruebas están a la vista!
Nada de aquello parece ver Urrutia, enceguecido en las pedestres fábulas y mitos del poder antidemocrático, haciendo tabula rasa de los crímenes cometido. (...) Tenemos que oponerle al oprobio la dignidad de quienes repudian la infamia y creen que podríamos ser un mejor preludio, del futuro espíritu y conciencia de los pueblos.
Juan Navarrete Espinoza Egresado de Historia Uach
Oposición a proyectos
Me llama la atención la cantidad de recursos presentados por los actuales propietarios del Mall existente, en contra del nuevo Mall en construcción. Sería interesante que los ciudadanos de Valdivia podamos saber cuál es el objetivo de tan tenaz oposición. Tengo la impresión que el nuevo Mall ha cumplido con todos los requerimientos exigidos, que corresponden y creo que este nuevo centro comercial es un paso adelante para nuestra ciudad porque se crea una nueva fuente laboral, desaparece un sitio eriazo a una cuadra de la plaza, hermosea nuestra ciudad, llegan sucursales de empresas que hoy no están.
También me llama la atención la oposición a los estacionamientos subterráneos. Me da la impresión de que hay personas de Valdivia, que su único interés es que esta ciudad sea solo un pueblo grande ¿o me equivoco?
Ricardo Schneider Saralegui propiedadessaralegui@hotmail.com
Trenes de cercanía
Mejorar el sistema de comunicación terrestre en la Región requiere sin duda diversificar el tipo de transportes que utilizamos y terminar con la dependencia absoluta de la conectividad vial. Incorporar un sistema ferroviario de cercanía, con bus carril o trenes de pasajeros, mejoraría sustancialmente la calidad de la conectividad regional, siendo un aliciente para el turismo, un atractivo que despertará el interés de los visitantes.
En numerosas ocasiones hemos planteado esta propuesta, señalando que en las naciones desarrolladas el modo ferroviario esta siempre a la vanguardia, sopesando nuestra realidad local cualquier equipamiento ferroviario menor aportaría sustancialmente a la calidad de vida de los habitantes regionales y al turismo en general.
Destacamos la idea planteada por el director del Centro para la Innovación y Desarrollo de la Industria, un Automotor Ligero Diesel Eléctrico apoyado por Corfo que puede conectar Valdivia y Los Lagos en 80 min. Esta innovación además permitiría facilitar la manutención de la vía del ramal Antilhue - Valdivia, proporcionando de esta forma la consolidación del Tren a Vapor El Valdiviano en su clásico recorrido, junto con la incorporación de nuevas estaciones.
Christian Naglieri Bilela Patrimonio Ferroviario Valdivia
Alta velocidad en Errázuriz
Escribo para hacer pública una situación que me preocupa. No existe
ningún semáforo ni paso peatonal en la Avenida Errázuriz, entre Circunvalación Sur y Rubén Darío. Eso ha hecho que grandes camiones se tomen esta avenida, trasladando hormigón, madera y chatarra a gran velocidad, sobrepasando el límite de 60 kilómetros permitidos en zonas urbanas, llegando incluso hasta los 90 kilómetros.
Los peatones no tienen definido por dónde atravesar la avenida, arriesgando sus vidas frente a los vehículos. Además de esto, el tránsito genera una cantidad importante de contaminación acústica, ruidos y vibraciones en las casas, lo que sucede hasta altas horas de la noche e interrumpe el sueño de los vecinos.
Urge que los organismos respectivos tomen cartas en el asunto y se pueda instalar elementos reductores de velocidad como lomos de toro, pasos peatonales y un semáforo, antes de que ocurran accidentes, puesto que, al parecer, solamente se instalan estos dispositivos una vez que ya han ocurrido las tragedias.
Pamela Romero Lizama Periodista pamelarome@gmail.com