Tras casi 19 años, el mural del hospital John Kennedy sigue en el abandono
NO HAY PROYECTOS DE RECUPERACIÓN. La obra del artista nacional Pedro Lobos permanece cubierta con una improvisada pared de madera en el ex casino del Parque Saval, desde noviembre de 1999.
El mural que el destacado artista nacional Pedro Lobos pintó en 1961 para el hospital John Kennedy, se encuentra en completo abandono desde noviembre de 1999. Y a pesar de que la estructura que lo rodea está muy deteriorada y expuesta al frío y la humedad, se conserva en buen estado y cubierto por una improvisada pared de madera.
Según expresó el gerente de la Corporación Cultural Municipal de Valdivia (CCM), Erwin Vidal, en estos casi 19 años ha intentado conseguir el apoyo necesario para la puesta en valor tanto de la obra como del edificio, pero hasta hoy no ha tenido respuesta.
Algo de historia
La historia del mural partió poco después del terremoto de 1960, cuando diversas organizaciones de Estados Unidos reunieron fondos para donar a la ciudad un hospital, el que contendría un mural. Para ello, recordó Vidal, se contrató al pintor Pedro Lobos, quien con la colaboración de Elsa Urzúa crearon el producto pictórico sobre la base de los conceptos de la desgracia, la solidaridad y la reconstrucción de Valdivia.
Las dimensiones originales eran de seis metros de largo por dos metros y 70 centímetros de alto, pintado en un muro curvo hecho con una mezcla de secado rápido.
Con el paso de los años, el hospital John Kennedy fue desplazado por el recinto asistencial actual y la empresa D&S adquirió el terreno para levantar allí el supermercado Líder. Para ello, debía demoler el antiguo inmueble.
"A través de una nota publicada por El Mercurio, se supo la situación en que se encontraba el mural y yo, que había leído la información, planteé al directorio de la Corporación Cultural Municipal el rescate de la obra, teniendo en cuenta que el Servicio de Salud no manifestó interés en trasladarlo al nuevo hospital", dijo Erwin Vidal.
El paso siguiente fue comunicarse con la firma propietaria del predio, "y logramos un acuerdo para que donaran el mural a la ciudad, por medio de la CCM, y asumieran el costo del traslado al ex casino, unos $25 millones. Ellos accedieron principalmente porque necesitaban construir el supermercado, y el mural suponía para ellos un obstáculo".
El edificio que acogería la obra -que data de 1939- había sido entregado en comodato a la CCM en 1998, para instalar en él la futura pinacoteca de Valdivia. "Pero en 2001 se nos caducó ese contrato para destinar el local a otros fines", señaló.
Respecto de la pinacoteca, que es otra iniciativa impulsada por la corporación, Vidal indicó que "lamentablemente, no se ha podido definir el uso del inmueble y hoy el proyecto está sólo en la idea. Espero que en algún momento se concrete, para poder albergar las más de 200 obras que conservamos".
Valor de la obra
En términos monetarios, el gerente de la CCM cree que el mural podría tener un valor económico cercano a los $100 millones, pero su real importancia radica en otro aspecto.
"Pedro Lobos pintó la obra para una ciudad que estaba devastada por un cataclismo. Un hombre y una mujer caminan con un niño en los hombros mirando el horizonte, lo que representa el futuro de una ciudad que está siendo reconstruida, proceso que es retratado en en dos trabajadores que cortan un árbol y un tercero con una carretilla. Es como un mensaje de aliento, y he ahí el verdadero valor del mural: es testigo de nuestra historia", explicó Erwin Vidal".