En 2014 el gobierno regional de Los Ríos hizo noticia porque decidió destinar una importante cifra del Fondo de Desarrollo Regional, FNDR, a la compra de terrenos para desarrollar proyectos habitacionales y solucionar la falta de vivienda para familias sin casa, residentes en 8 comunas. Era un plan inédito y con un profundo contenido social, aplaudido de manera transversal, aunque no pudo comenzar materializarse sino hasta 2016, cuando finalmente fueron aprobados los dineros por 5 mil millones de pesos y la primera "bajada" para la compra efectiva se hizo recién en octubre de 2017, con el traspaso hacia el Serviu, que debía adquirir 14 hectáreas en Valdivia, Lanco, Río Bueno, Paillaco y Mariquina.
Lamentablemente, el proceso ha seguido demorando muchísimo y esa buena noticia hoy se ha enrarecido. Ahora existe un problema con la segunda parte de los dineros, que suman $2.478 millones para otras 32 hectáreas. No se pueden transferir a estas alturas del año y el plan deberá esperar. Las autoridades del gobierno aseguran que no hay riesgo de "perder" recursos; pero los futuros beneficiados desconfían y creen que ha habido "negligencia" .
En este escenario y sumado a las decisiones no informadas a la comunidad de manera oportuna y transparente, el escenario es complejo. Los vecinos que integran los comités de allegados ya realizaron manifestaciones públicas (en la plaza de la República el viernes y cerca del Cau Cau ayer, coincidiendo con la visita del Presidente Piñera) y tienen profunda razón en pedir más claridad.
Para ellos, como para toda la comunidad, no bastan las explicaciones sobre la ineficiencia de los gobiernos anteriores. Además, ya han escuchado muchos de esos argumentos. En la administración Bachelet les dijeron que "había subsidios sin proyectos" y, actualmente, que "durante dos años hubo inacción". Pero ninguna frase implica soluciones con plazos.
Con tristeza, además, el tema ha servido como argumento para utilización política de actores diversos.
Es necesario que este tema sea aclarado y que tanto el Core en su conjunto, como desde la intendencia, reiteren su compromiso con esta promesa que es estatal y con fondos públicos; no un simple discurso electoral que se puede postergar.