Con 147 votos a favor, uno en contra de la diputada Pamela Jiles (PH) y una abstención de Hugo Gutiérrez (PC), la Cámara aprobó el proyecto de migración y extranjería, que ahora será despachado al Senado para su segundo trámite.
La iniciativa, presentada en 2013 durante el primer Gobierno de Sebastián Piñera y perfeccionada en el actual período, persigue regular el ingreso, la estadía, la residencia y el egreso de los extranjeros al país, como también el ejercicio de derechos y deberes.
Beneficios sociales
El acuerdo para permitir su avance y aprobación contempló, entre otras cosas, que el Gobierno accediera a que los extranjeros puedan obtener algunos beneficios sociales que entrega el Estado desde el momento que arriban al país, como salud y educación. Eso sí, no podrán recibir bonos (beneficios monetarios) hasta que no cumplan dos años en Chile.
El proyecto aprobado asegura a todo extranjero que solicite el ingreso o un permiso de residencia en el país, la aplicación de un procedimiento racional y justo para la aprobación o rechazo de su solicitud, el que se efectuará bajo criterios de admisión no discriminatoria.
En lo que respecta a los derechos laborales, la iniciativa advierte que los extranjeros gozarán de los mismos derechos que los chilenos y que todo empleador deberá cumplir con sus obligaciones legales en materia laboral, sin perjuicio de la condición migratoria irregular del extranjero contratado.
Los extranjeros, asimismo, podrán acceder a las instituciones de educación superior en igualdad de condiciones que los nacionales, pudiendo, además, optar a la gratuidad universitaria.
Ingreso y egreso
La entrada y salida de personas al territorio nacional, señala el texto, deberá efectuarse por pasos habilitados, con documentos de viaje y sin que existan prohibiciones legales a su respecto.
En cuanto a la permanencia transitoria, se plantea que los extranjeros podrán permanecer en el país hasta por 90 días y que será la Subsecretaría del Interior la que podrá limitar dicho plazo a un período menor, por razones de orden público.
Respecto de la residencia oficial, la iniciativa plantea que podrán postular los cónyuges o convivientes del residente oficial titular; los hijos del residente oficial titular, de su cónyuge o conviviente, siempre que sean menores de 18 años de edad o se trate de personas con discapacidad y para el caso de los residentes oficiales miembros, se podrá extender el permiso también al personal que le preste servicios en calidad de trabajadores de casa particular.
Residencia temporal
Sobre la residencia temporal, esta se podrá conceder a quienes acrediten tener vínculos de familia con chilenos o con residentes definitivos, mientras que la residencia definitiva solo se podrá otorgar a los extranjeros poseedores de un permiso de residencia temporal que expresamente admita postular a ella y que cumplan con los requisitos establecidos en la presente ley.
La ley también establece que las personas naturales y jurídicas que faciliten o promuevan el ingreso y egreso clandestino de un extranjero al país, serán sancionadas con multa de 50 a 100 UTM.
La iniciativa, asimismo, crea el Servicio Nacional de Migraciones, encargado de ejecutar y colaborar con el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, en la realización de políticas en materia de extranjería y migración.
Ministro Chadwick: hubo "descontrol"
El ministro del interior, Andrés Chadwick, agradeció a los legisladores por la votación insistiendo en que esto permitirá "ordenar la casa". "Se produjo un descontrol de la migración. Más de 700 mil ingresaron como turistas y todavía estamos pagando los costos de eso. Si (alguien) llega como turista, se tiene que quedar como turista e irse como turista. Si quiere cambiar su categoría migratoria, debe volver a su país y tramitarlo", explicó el secretario de Estado.