Nicolás Maduro denunció que sus adversarios venezolanos con el auspicio de Estados Unidos son los artífices de la supuesta crisis humanitaria con el propósito de quebrantar la soberanía de su país y justificar el derrocamiento de su Gobierno.
"La soberanía nacional está tratando de ser vulnerada con un show llamado operación humanitaria por el Gobierno de Donald Trump, quien ha ratificado su amenaza de invasión militar contra Venezuela", dijo Nicolás Maduro en una rueda de prensa.
La declaración se dio un día después de que los primeros camiones con ayuda humanitaria arribaran a la ciudad fronteriza colombiana de Cúcuta.
"La ayuda humanitaria la han convertido en un show para justificar una intervención en el país", insistió Maduro, quien destacó que esto ocurre mientras "nos bloquean casi 10 mil millones de dólares en el mundo".
La oposición venezolana ha prometido entregar la ayuda humanitaria pero aún se desconoce el mecanismo para lograrlo, porque el paso fronterizo que se emplearía ha sido bloqueado por los militares.
Otra de los interrogantes sobre el proceso es el comportamiento que tendrían los militares, principal base de apoyo del gobierno chavista, cuando los opositores traten de ingresar los cargamentos hacia territorio venezolano.
Ayer, en un centro de acopio que habilitó el Gobierno colombiano en Cúcuta, a unos 500 kilómetros al noreste de Bogotá, a un lado del puente fronterizo Las Tienditas, voluntarios llenaban bolsas con alimentos proporcionados por Estados Unidos.
Embajador de ee.uu.
En Cúcuta, el embajador de Estados Unidos en Colombia, Kevin Whitaker, dijo que contrario a lo que dice el Gobierno venezolano, la ayuda "es un esfuerzo para responder a 20 años de mala gestión, de corrupción, de criminalidad e ineficiencia. Eso tomará tiempo para abordar. Hay una gran voluntad en la comunidad internacional para responder".
Agregó que "esto se trata de una campaña humanitaria con base moral y ética para aliviar el dolor y el hambre. Es legal. Está autorizado por el Presidente interino, Juan Guaidó, y es urgente".
Guaidó, jefe de la Asamblea Nacional venezolana (de mayoría opositora), quien el 23 de enero se declaró Presidente interino en desafío a Maduro, promovió la iniciativa de recibir ayuda internacional.
Ayer, el líder opositor calificó de "miserables" a las autoridades que no permiten el ingreso de la ayuda. "No es capricho, no es migaja, es necesidad", dijo Guaidó ante miles de jóvenes en la Universidad Central de Venezuela, de Caracas.
"El momento es ahora. No cometan crimen de lesa humanidad al asesinar directa o indirectamente a entre 250 mil y 300 mil venezolanos que hoy necesitan esa ayuda", afirmó Guaidó al dirigirse a los militares para que no bloqueen el ingreso de la ayuda. El dirigente llamó a la población a realizar, hoy y mañana, asambleas para organizar a los voluntarios que recibirán la ayuda.
Venezuela sufre la mayor crisis política y económica de su historia con una hiperinflación de siete dígitos y una severa recesión. La escasez de alimentos y medicinas, entre otros bienes, ha generado una masiva migración de venezolanos que la ONU calcula en al menos 3 millones de personas.
Nulidad
En Caracas, en tanto, el Tribunal Supremo de Justicia, controlado por el oficialismo, declaró nula la ley que regiría la "transición política" aprobada por la Asamblea Nacional si llegare a finalizar el Gobierno de Maduro.
La Sala Constitucional del máximo tribunal estableció que la Asamblea Nacional cometió una "fragrante infracción" al aprobar una ley que establece que las elecciones presidenciales se hagan tan pronto como las condiciones lo permitan en un plazo máximo de 12 meses tras la instalación de un gobierno interino y tras la designación de nuevos miembros de los otros poderes.
La sentencia acusa a la Asamblea Nacional de incurrir "en el asalto del estado de derecho".
"La oposición no quiere elecciones"
Maduro aseguró estar "dispuesto" a reunirse con enviados del grupo de contacto internacional impulsado por la Unión Europea y conformado por naciones europeas y latinoamericanas, el que busca crear las condiciones para que se pueda convocar a elecciones "justas" y "libres" en el país. Pero también acusó a la oposición venezolana de no querer elecciones: "Ellos quieren un golpe de Estado, quieren hacer como Pinochet y arrasar con el 'chavismo". El jefe de Estado del país caribeño se mostró convencido de que si el Gobierno anunciara unas nuevas elecciones presidenciales en 30 días, ellos dirían "mil cosas para no ir, como hicieron en 2018".
mil venezolanos pueden llegar a morir si no reciben la ayuda humanitaria, dijo Juan Guaidó. 250 a 300
millones de venezolanos, al menos, han migrado desde su país debido a la crisis, estima la ONU. 3