En el mundo, la Hora del Planeta se celebra hace trece años. Y en Chile, hace diez. Durante una hora se le pide a la ciudadanía, a las empresas y a los organismos públicos que se unan y apaguen sus luces. Se trata de la mayor acción voluntaria del planeta contra el cambio climático global y cada año se busca difundir con ella nuevos mensajes, por ejemplo, que las acciones que cada persona realiza para proteger el medioambiente, por más pequeñas que parezcan, cuentan. La versión de 2019 está enfocada a la "generación del cambio", a pasar de la conciencia y la reflexión a la acción individual.

El sábado las luces fueron apagadas en Valdivia, una de las primeras ciudades del país en adherir a este movimiento impulsado, primero, por la World Wildlife Fundation (WWF) y hoy apoyado por el Ministerio de Medio Ambiente y el municipio, además de agrupaciones dedicadas a generar conciencia ambiental o a presentar iniciativas concretas contra el cambio climático.

En Valdivia, a partir de las 20.30 horas, se apagó la costanera. El sector donde se encuentra el Péndulo de Foucault y la Feria Fluvial quedaron a oscuras, además, algunos restaurantes y pubs se sumaron, colocando velas en las mesas.

Sin embargo, las actividades habían comenzado dos horas antes. En el anfiteatro de la Costanera de la Ciencia, organizaciones sociales y empresas instalaron sus stands para informar a los transeúntes sobre sus actividades y entregar ideas para colaborar. Además, fueron impartidos talleres sobre reciclaje de residuos orgánicos, compostaje y vermicompostaje, proceso en el que se usan lombrices. Hubo exposiciones sobre economía circular, recolección selectiva y gestión de residuos reciclables. También se desarrolló el conversatorio "60 ideas para cuidar el planeta".

Todo es necesario

Una de las principales dudas de quienes recorrían los stands era: ¿Las cosas que yo pueda hacer realmente van a servir? Y la respuesta de todos, líderes sociales y autoridades, fue un rotundo "¡Sí!".

Rodrigo Catalán, director de Conservación de WWF, explicó que "este verano ha sido más que evidente que el cambio climático llegó, con temperaturas de 38 grados, incendios forestales y marea roja. El cambio climático ya no es algo del futuro y las acciones se deben hacer ahora. Más que hablar, se deben cambiar hábitos individuales".

Catalán recalcó que las acciones pequeñas impactan. "Nosotros, los humanos, actuamos como manadas de animales, bandadas de pájaros o cardúmenes de peces. La suma de todas las acciones individuales son las que terminan generando impacto. Y si nosotros además de hacer actos individuales -como reducir nuestro consumo de energía en los domicilios; usar el transporte público, la bicicleta o caminar; o reducir el consumo de agua y reciclar- y lo vamos compartiendo con nuestro núcleo cercano, con nuestra comunidad escolar o laboral y nuestro barrio, esto empieza a ser una ola", expresó. El director de Conservación de WWF agregó que las acciones individuales sí importan. "La suma de ellas también va a llevar a que otros actores importantes, como los gobiernos locales y los gobiernos regionales, además de las empresas, sigan esta ola. Es la ciudadanía la que tiene que mover la agenda, como ha movido en otros procesos, como el movimiento feminista", contó.

Evitar excesos

Para el seremi de Medio Ambiente, Daniel del Campo, las acciones individuales también pueden impactar cuando las personas se proponen evitar los excesos. "¿Para qué tener las ampolletas prendidas de más? ¿Para qué dejar corriendo el agua? ¿Para qué usar dos bombillas en un trago? ¿Para qué usar tantas bolsas plásticas? No es que yo tenga que perjudicar mi calidad de vida, sino que todos tenemos que hacer esfuerzos en términos de consumo de agua, de consumo energético y de generación de basura. Son pequeños detalles que uno puede hacer, pero que no limitan mi libertad ni disminuyen mi estilo de vida. De otra manera no se va a avanzar", dijo.

Recordó que existen acuerdos internacionales que buscan que los países y sus actividades productivas generen menores daños al medioambiente. Sin embargo detalló que "ya se ha establecido que los compromisos que se hicieron para el Acuerdo de París no van a lograr la meta de reducir el calentamiento global. Entonces, no es suficiente que solo actúe la industria, no es suficiente solo lo haga la agricultura o solo se lo propongan las personas en sus domicilios".

Esfuerzo municipal

Como en versiones anteriores, la Municipalidad de Valdivia nuevamente fue parte de la organización del evento. El alcalde de Valdivia, Omar Sabat, explicó que "como municipio trabajamos en forma habitual para cuidar el medio ambiente. Ello significa realizar una serie de acciones en conjunto con la comunidad para crear conciencia en esta importante temática. Ello se suma a las acciones habituales, como armar alianzas estratégicas con la seremi de Medio Ambiente, trabajar en el reciclaje, en la eliminación de bolsas plásticas, en educación y en el cambio que realizaremos de luminaria pública a tecnología led".

fue la primera vez que se celebró la Hora del Planeta. Comenzó en Sidney impulsado por la WWF. 2007

se desarrolló el evento en Chile, donde una de las ciudades que primero se adhirió fue Valdivia. 2009

lel evento se enfocó en incentivar a esta generación a desarrollar cambios por el medioambiente. 2019