Anegamientos en la costanera
Es lastimoso que los problemas hayan aparecido tan cerca de la puesta al servicio de la comunidad. Al parecer, este pequeño detalle no fue debidamente tomado en cuenta.
Que el Gobierno haya decidido hacer uso de la garantía que mantiene con la empresa Sicom Limitada, que fue la encargada de los trabajos de remodelación del primer tramo de la costanera de Valdivia constituye un hecho de por sí bastante lamentable, pero que no es excepcional y que obliga a tomar mayores resguardos cuando se encargue una obra de gran envergadura.
Lo ocurrido con el puente Cau Cau sirvió para que en todo el país se mencionara a Valdivia de manera negativa e incluso los errores cometidos en la obra traspasaron las fronteras nacionales y el hecho fue incluido en una serie de recuentos relacionados con cómo no se deben hacer las cosas.
El caso de la costanera, que presenta sectores notoriamente anegados por efectos de la lluvia y cuando todavía el viento no se ha llevado los restos de la cinta inaugural, resulta preocupante, porque hay que recordar que desde diversos sectores ciudadanos surgieron críticas al diseño del tramo renovado, especialmente referidas a la ausencia de espacios verdes en beneficio de la plataforma de concreto. De poco han servido las explicaciones que apunta a la necesidad de contar con un espacio adecuado para recibir a gran cantidad de personas durante las numerosas ocasiones en que la costanera es propicia para espectáculos masivos.
Resulta molesto que un espacio público de tan relevancia presente problemas cuando ha pasado tan poco tiempo desde su entrega a la comunidad y también resulta inexplicable que el problema tenga que ver con la acumulación de aguas, porque ocurre justo en la ciudad grande más lluviosa de todo el país. Al parecer, este pequeño detalle no fue debidamente tomado en cuenta.
Es de esperar que la situación quede resuelta a la brevedad posible y que los costos de la reparación los asuma quien corresponde.
Valdivia es una ciudad que se destaca en el país por sus singularidades, comenzando por la presencia fluvial. Por lo mismo, la costanera debe ser un lugar urbanísticamente perfecto, o cercano a ello.