Correo
Al soldado desconocido
Quizás era un hijo de panadero, de campesino o de carnicero. Puede que haya sido un intelectual o quizás un vagabundo. Su nombre no llegó a nosotros, pero sus pies llegaron lejos, hace 140 años. Quizás estaban llenos de ampollas, por el esfuerzo de caminar kilómetros, en defensa de su patria. Su recuerdo estaba en esa estatua, en la Plaza Baquedano, en Santiago. Hoy, quienes se arrogan el nombre del pueblo han derribado el monumento que el propio pueblo erigió. Nadie está muerto mientras es recordado.
Cristian Parada circuloacton@gmail.com
Fuentes informativas
Esta semana fuimos testigos de una aclaración realizada por un diario nacional en la que pide disculpas por haber publicado una noticia sin haber corroborado su contenido. En la nota, publicada el día 28 de octubre, el periódico afirmaba que fuentes de inteligencia habían detectado la participación de ciudadanos extranjeros en manifestaciones violentas.
En la aclaración, el medio menciona que la información surgió de una minuta oficial que reunía información proveniente de "fuentes abiertas y cerradas" respecto de los atentados a la red del Metro y que terminaron en ataques incendiarios perpetrados el fin de semana.
En los tiempos actuales y sobre todo en estas semanas de tanto flujo informativo, es relevante que un medio de tanta influencia en la opinión pública asuma su responsabilidad y tenga la valentía de decir que se equivocó. Ante acciones como ésta, y en nuestra calidad de usuarios, no nos cabe más que reflexionar sobre el tipo de información que circula tanto en medios como en redes sociales y los cuidados que debemos tener al momento de otorgar credibilidad a diversas fuentes informativas, sobre todo cuando involucran a personas inocentes, en muchos casos extranjeros, que vienen en búsqueda de una mejor vida en nuestro país.
Marcela Vera Urra Doctorado en Comunicación Uach-Ufro Universidad Austral de Chile
Pido disculpas
El estallido social que enfrentamos, sorprende nuevamente a las elites y expresa el profundo malestar que ha venido larvadamente creciendo en la ciudadanía; malestar que hoy es un repudio total y profundo a las bases del sistema político, económico y social.
(...) Es tiempo de asumir el fracaso de todo el entramado político, jurídico y económico que nos rige y dar paso a una transformación estructural. Quienes hoy tienen la representación democrática parlamentaria formal, están deslegitimados y deben abrirse a la cuestión de fondo: Nueva Constitución.
Con la misma claridad debemos decir y reconocer que quienes hemos estado en política los últimos 30 años también tenemos responsabilidades porque no hicimos lo que pudimos haber hecho por corregir un modelo que nos llevó a estas terribles injusticias que afectan a millones de compatriotas. Con sinceridad pido disculpas en lo que a mi responsabilidad se refiere.
Alejandro Köhler Vargas Ex alcalde de Panguipulli
Sobre el sistema
El modelo Neoliberal funciona a la perfección a nivel Macro. En indicadores como inflación, crecimiento y disminución de la pobreza, Chile ha sido un niño aplicado. Sin embargo, ¿cómo explicar entonces que, con una inflación controlada, aumento del ingreso per cápita y el supuesto funcionamiento institucional, a las familias promedio les sea cada vez más difícil llegar a fin de mes y se haya acumulado un descontento generalizado?
Leonardo Boff (teólogo, ex sacerdote, filósofo y ecologista brasileño) afirma "que este modelo no consigue generar riqueza sin al mismo tiempo crear pobreza". (...) Que suba el precio de la champaña, no es lo mismo que suba el precio de la micro, sin embargo, para efectos estadísticos que aumente uno u otro afecta de igual manera a ricos y pobres. De igual forma, el modelo de AFP funciona bien para aquellos que tienen sueldos sobre el promedio y no tienen lagunas en sus cotizaciones, dejando fuera de los resultados esperados (pensión digna) a gran parte de la población.
Por otra parte, la creación de una riqueza material crea al mismo tiempo una pobreza que no es absoluta, sino relativa en cuanto de lo que tengo respecto de lo que tienes tú. El modelo actual se sustenta en el consumo. Lo que tenemos deja de ser suficiente al momento que el mercado nos ofrece un modelo superior (teléfonos, TV, autos).
La respuesta la escuchamos a diario por parte de nuestra clase dirigente en que el crecimiento de nuestra economía será la solución a los problemas sociales, sin embargo, ningún sistema puede crecer por siempre. El sistema económico requiere de insumos que son finitos y por otro lado genera residuos que hoy nos tienen al borde del colapso climático.
La solución de este entuerto no es definitiva, sino dinámica. No es posible pensar que un paquete de medidas pueda apaciguar el descontento social acumulado, sino más bien es un cambio de actitud, tanto de nuestra clase política y dirigencial, como de los ciudadanos de a pie con derecho a elegir a esa clase tan degradada hoy.
Nicolas Nazal Schuenemann Funcionario y Académico Uach