A 19 días de iniciada una ola de protestas en todo el país, el Presidente Sebastián Piñera dio su primera entrevista sobre la crisis social a la cadena británica de televisión BBC. Al ser consultado por una eventual acusación constitucional en su contra o qué le parece que le pidan la renuncia, el jefe de Estado contestó: "Por supuesto que voy a llegar al fin de mi Gobierno. Fui elegido democráticamente por una enorme mayoría de chilenos y tengo un deber y compromiso con esos que me eligieron y con todos los chilenos".
"Si alguien quiere hacer una acusación constitucional, está en su derecho, pero yo estoy absolutamente seguro que ninguna de ese tipo de acusaciones va a prosperar, porque la solución en democracia es respetar las reglas de la democracia y no atentar contra la democracia pretendiendo desestabilizar a un gobierno que ganó las elecciones legítimamente y por una amplia mayoría", agregó Piñera.
"no habrá impunidad"
Sebastián Piñera también dijo a la BBC que "en las últimas dos semanas hemos estado experimentando dos fenómenos diferentes, de naturaleza distinta. Primero, y esto fue absolutamente inesperado, una gran ola de destrucción, de violencia, de una manera muy organizada. Pudieron dañar o quemar hasta las cenizas casi 100 de las 136 estaciones de metro, además de supermercados, comercios, pequeñas tiendas".
"Esa violencia no puede ser admitida, no está dentro de la ley. Tuvimos que usar herramientas democráticas y constitucionales, como el decretar el estado de emergencia, para restituir el orden público y proteger a nuestros ciudadanos", explicó el Presidente. Al decidir la medida de excepción "tomamos muchas precauciones (...) En primer lugar, llamamos a nuestro Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) para que se encargara de proteger los derechos humanos y les dijimos que les daríamos todas las facilidades, todos los recursos logísticos para que puedan cumplir con su deber".
El mandatario también señaló que luego estableció las "reglas de uso de la fuerza que están absolutamente de acuerdo con los estándares más altos del mundo, y les dijimos a todas las personas a cargo de esto y también a la policía que tenía que obedecer y cumplir esas reglas".
Finalmente, dijo que "puedo garantizar que para mí y para mi Gobierno el compromiso con los derechos humanos es el más alto", y también aseguró que "no habrá impunidad con las personas que prendieron fuego a los supermercados y a la mayoría de nuestras estaciones de Metro, ni con aquellas que eventualmente cometieron un exceso de uso de la fuerza".
Desigualdad y abusos
Sobre la desigualdad en el país, Piñera sostuvo que "Chile está en promedio en términos de desigualdad en América Latina. Por supuesto, sigue siendo un país muy desigual y es por eso que estamos luchando para vencer la pobreza y reducir la desigualdad, pero no es el país más desigual de América Latina". Agregó que "la gente tiene la percepción, y con mucha razón, de que en Chile hay demasiados abusos, de que hay muchas empresas que no respetan a sus clientes, a sus trabajadores y el medioambiente. Después de mucho tiempo de acumular, decidieron manifestarse con toda la fuerza que lo han hecho".
Sobre una nueva Constitución, afirmó que "después de restaurar el orden público y poner en marcha la agenda social, no termina el debate y vendrá una segunda etapa en que estamos dispuestos a conversarlo todo, incluyendo una reforma a la Constitución".
19 días de protestas en todo el país se cumplieron ayer. Se iniciaron el 18 de octubre.
78% de desaprobación al trabajo del Presidente hubo en octubre, según las cifras de la Encuesta Criteria.
13% de aprobación registró el trabajo del Gobierno ante la crisis, junto a un rechazo del 83%.