Para el martes quedó fijada la reunión en que los dirigentes del fútbol profesional decidirán de manera, que seguramente será definitiva, acerca del futuro de la actividad en relación a la presente temporada.

El problema afecta a todos los clubes, aunque de diferentes formas. Para algunos es sinónimo de incógnita frente a compromisos internacionales, mientras que para otros se trata de algo mucho más trascendente, casi vital.

Es lo que ocurre con Deportes Valdivia, que hasta antes de la paralización enfrentaba un complejo panorama. Sumido en la última ubicación de la Primera B, estaba obligado a una misión casi imposible para escapar de la caída a la Segunda División. Necesitaba ganar todos los puntos que le restaban por disputar y esperar que sus rivales más cercanos no sumaran. El entrenador alemán Jürgen Press fue preciso cuando dijo que se requería de un milagro para salir ilesos del desafío.

¿Será la suspensión forzada del torneo la concreción del milagro aguardado por el entrenador?

Lo será, siempre que el Consejo de Presidentes encuentre una solución que satisfaga a todos los que tienen algo importante en juego, como, por ejemplo, impedir los descensos inmediatos de los equipos que actualmente están en riesgo en todas las divisiones. ¿Hay salidas intermedias? Sí, la hay, pero con el fútbol profesional es arriesgado anticiparse a los hechos.

Ideas más, ideas menos, de la reunión de pasado mañana no surgirán todas las soluciones, porque además de ofrecer justicia a los participantes, los directivos deben encontrar un camino para responder a las exigencias internacionales, entre otros requerimientos, como mantener en pie el pilar que ha sido el principal sustento de la actividad, el Canal del Fútbol, cuyos suscriptores ya están cansados de ver repeticiones de partidos o intrascendentes programas de entretención, muy alejados a lo que lo esperan y a lo que han comprado.

Van a necesitar bastante inspiración los mandamases de los clubes para salir airosos del problema.

Claramente nuestro país se encuentra en un momento de definiciones claves para el futuro, una bisagra que debe pensarse con responsabilidad y altura de miras. Si bien, por las redes sociales vemos una polarización de visiones con imágenes de alto impacto que pueden generar incertidumbre para lo que viene, como gremio tenemos la convicción de que ese enfrentamiento y división, no es lo que siente la gran mayoría de los chilenos, que quiere soluciones.

La clase política anunció un acuerdo histórico y han estado avanzando en medidas de corto plazo que inician el camino para frenar y revertir la actual brecha social, y así hacerse cargo de este descontento y estallido social. Se pusieron a la altura para lograr entender las legítimas demandas que por muchos años estuvieron postergadas.

Pero esto debe ir más allá. Más allá de la clase política, por lo que nuestro llamado es que como gremios y empresas trabajemos unidos para salir adelante. Como Saval FG contribuimos desde una mirada transversal al desarrollo de nuestro sector, pero también a que se fije el camino que por fin nos lleve a ser una sociedad más justa y equitativa, con el apego irrestricto a la institucionalidad vigente, de la mano con la protección de la propiedad privada y de los bienes públicos.

Hace un tiempo, preparamos un documento formal que fue presentado en distintas instancias, donde instalamos los problemas de la agricultura por delante para proponer acciones que puedan aplicarse en el corto plazo. Por ejemplo, establecer sistemas de apoyo hacia la agricultura, bajo el concepto que es un sector estratégico para dar seguridad alimentaria de país, dando énfasis en la producción primaria. Creemos que se hace necesario establecer líneas de financiamiento de largo plazo con Banco Estado, sin discriminación en las tasas de interés debido al tamaño del productor, entre otras ideas. A nivel local, organizamos hace unos meses el Seminario Regional sobre Fomento de la Asociatividad en Productores de Carne Bovina. Instancia organizada con la Corporación Regional de Desarrollo Productivo, que tuvo la finalidad de sentar las bases para un trabajo en conjunto y de esta forma estar preparados para enfrentar, sobre todo ahora, la incertidumbre que vive el país y nuestro rubro ganadero de carne que merece una atención especial. Es deber de todos avanzar, y para ellos estamos coordinándonos con otras agrupaciones, para generar avances que vayan en beneficio de la actividad agropecuaria de nuestra región de Los Ríos, abordando las tareas pendientes que tanto se necesitan aplicar en nuestro sector, y así continuar siendo uno de los pilares en la generación de empleo en la zona.

Víctor Valentin Presidente de Saval F. G.

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