"Nuevos escenarios"
Jefa de carrera TEGYN UST.
Nuestro país se ha visto enfrentado a un estallido social que nadie esperaba. Las demandas de la ciudadanía en torno a las desigualdades son cada vez más potentes, las movilizaciones, marchas, expresiones artísticas ponen de manifiesto el descontento existente.
En este contexto no hay que olvidar que nuestros adultos mayores son la población que más desigualdad y vulneración de derechos enfrentan. La gran sobrecarga de enfermedades del adulto mayor, bajas pensiones, imposibilidad de acceder a vivienda propia, el desapego de la familia y la invisibilidad social han gatillado además un fenómeno en salud que es preocupante; el aumento de patologías de salud mental.
La incertidumbre de la subsistencia, la falta de apoyo y el aislamiento social han significado un aumento en el diagnóstico de depresión en el adulto mayor y este estado puede incluso exacerbar las sintomatologías de otras patologías concomitantes, complicando el estado de salud general.
Es de vital importancia, entonces, propender políticas publicas atingentes a mejorar las prestaciones de salud mental en la población adulta mayor, que incorpore no solo terapia farmacológica sino que también asegure la atención médica y de psicólogo, así como psicoterapia si es necesario.
No hay que olvidar tampoco que es fundamental que como sociedad les demos el lugar que merecen, reconocer sus logros, incorporarlos a la toma de decisiones, pero por sobre todo el cuidado, contención y presencia de la familia, no solo como apoyo económico sino también emocional.
Evelyn
Hernández