Dios. Una historia humana
En "Dios. Una historia humana" (Taurus, 2019), el intelectual iraní-estadounidense Reza Aslan no pretende convertir a fe alguna ni, por el contrario, tampoco busca incitar a la apostasía. Ni siquiera, reconoce, tiene interés en dedicar algunas de las 367 páginas de su obra a probar la existencia o la no existencia de una divinidad suprema. Su afán es otro: abordar de forma amplia, documentada y con un estilo accesible, la naturaleza de las deidades a través del tiempo y las culturas.
Este viaje histórico y espiritual, que Aslan inicia con su testimonio personal de la búsqueda de Dios, tiene como premisa principal la idea de que el ser humano ha creado la figura de Dios a su imagen y semejanza. Aquí recalca una cita del filósofo alemán Ludwig Feuerbach, referente a la poderosa expansión del cristianismo en el mundo: "solo un ser que comprende en sí a todo el hombre puede satisfacer a todo hombre".
Desde ahí, el autor explora desde la noción de alma, probablemente la primera creencia que tuvo la humanidad; pasando por el animismo, el politeísmo y el monoteísmo, hasta llegar a los sufíes. Aslan desemboca en una conclusión de corte humanista, al proponer que debe verse al mundo como un todo divino, y a cada uno de sus habitantes también como parte o expresión de esa divinidad. Por tanto, las diferencias entre religiones, e incluso entre creyentes y no creyentes podrían verse eliminadas, y con ello buena parte de los conflictos que histórica y actualmente enfrentan a los seres humanos. Porque Aslan no peca de ingenuo en este libro, y reconoce explícitamente que por siglos "la religión ha sido una fuerza motriz tanto para el bien infinito como para el mal más indescriptible; por qué la misma fe en el mismo Dios inspira amor y compasión en un creyente, pero odio y violencia en otro…". Este libro es una buena muestra de pericia para traducir la teoría académica en una narrativa amigable y envolvente hasta para el más escéptico, a la vez que deja ventanas abiertas en su "agnosticismo metodológico" para compartir una perspectiva personal como creyente y promotor de ideas de corte panteísta.
Daniel
Carrillo