"Acá en Huapi son primordiales los cursos, porque uno aprende bastante. No hay que olvidar que estamos muy aislados de muchas cosas y necesitamos apoyo".

Las palabras son de Magaly Nanco y reflejan su logro personal tras haber participado en el primer curso de capacitación en confección y corte de vestuario que un grupo de mujeres realiza en la isla Huapi (Futrono). El beneficio ocurre a dos años de que en el lugar se habilitara la energía gratuita y sustentable gracias a 151 sistemas de paneles fotovoltaicos que brindan electricidad a medio millar de habitantes.

El curso, cuya certificación se realizó a inicios de semana, fue una iniciativa inédita en la localidad, la cual posee una superficie de 820 hectáreas en donde viven 151 familias, todo, a 12 kilómetros de Futrono, en medio del lago Ranco.

Allí, por gestiones del Consejo Regional de Los Ríos ante el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), se desarrolló este curso de 160 horas que benefició a 15 mujeres, el cual involucró un subsidio de materiales con el cual cada una de participantes adquirió modernas máquinas de coser con las cuales esperan desarrollar microemprendimientos aprovechando los turistas que llegan a la zona.

Aprender a tomas medidas, uso de moldes y el manejo de máquinas de coser, fueron parte de los contenidos impartidos, en clases de lunes a viernes, de 8 horas diarias, durante un mes.

"La mayoría no había manipulado nunca una máquina de coser, entonces fue todo nuevo para ellas, pero siempre las noté muy contentas, yo logré adaptarme a ellas y a sus necesidades", sostuvo Matilde Fuentealba, profesora de la capacitación.

"Esto es una herramienta para nosotras, porque ya me ha servido para confeccionar pecheras y fundas de sillones. Me gustaría hacer algo con un eslogan mío, como ropa para niños", explicó Magaly Nanco, mientras que Isabel Ñancumil, destacó que "gracias a los paneles solares ahora podemos coser en las casas. Así podré hacer mis arreglos, trabajar haciendo ropa, sábanas, cortinas, poner cierres, hacer ojales, todo lo que aprendí en este curso. Quiero, ojalá, generar un ingreso extra para mi familia".

Territorio aislado

Previo a este curso y dada su ubicación, isla Huapi carecía de los servicios de una costurera, por lo que cada confección o reparación de ropa, debía hacerse únicamente en Futrono.

"Acá en la isla tenemos mucha ropa que tenemos que arreglar, ropa que se rompe y que se deja de usar. A futuro me gustaría ojalá poner una feria de costura con productos hechos por nosotras mismas, para que los turistas se puedan llevar recuerdos", sostuvo Mónica Garnica, mientras su compañera Sandra Manque, complementó: "Yo nunca había tocado una máquina de coser y aquí pude aprender de costura. Acá no hay costurera, tampoco hay una peluquería, entonces son esas las cosas que hacen falta y que son tan comunes en otras partes".

Quien coincidió con esto fue el consejero regional Luis Quezada, quien agregó que "en isla Huapi falta de todo. Faltan peluqueros y si quieres contratar un carpintero debes buscarlo en Futrono y pagarle el traslado todos los días. Por eso creo que Sence, con sus cursos de capacitación, puede hacer mucho por los isleños".

Catalina Hott en tanto, precisó que "como cores debemos poner el énfasis en que nuestras mujeres cada vez estén más capacitadas y tengan las herramientas para seguir creciendo como familia, como mujeres, que buscarán tener emprendimientos y prestar un servicio a su comunidad".

"El Gobierno Regional trata de potenciar a las familias y fortalecer los emprendimientos personales, por eso este curso va destinado a eso, porque isla Huapi está teniendo un desarrollo principalmente en la línea turística", sostuvo el core Elías Sabat, quien añadió que "isla Huapi está atrasada años luz: todavía no tiene agua potable ni alcantarillado, la electrificación se logró con financiamiento FNDR, por lo tanto estas inyecciones de recursos tienen que ir destinadas a las personas, y ahí Sence ha sido un pilar de apoyo y ayuda para lograr todo esto".

Álex Valderrama, director de Desarrollo Comunitario (Dideco) de Futrono dijo que "este curso es mérito" de las mujeres de Huapi, "porque son ellas las que luchan constantemente y levantan las necesidades de esta isla. Ellas son quienes nos dicen qué recursos necesitan (...) para poder enfrentar los desafíos que tienen nuestro país y la región".

Desafíos

La llegada de la electricidad -mediante paneles solares- marcó un antes y un después para isla Huapi, sostienen sus habitantes, quienes dejaron atrás los lavados de ropa a mano y las dificultades para iluminar sus hogares de noche. "Ahora las máquinas de coser también las podemos enchufar en las casas", afirmó el lonco de isla Huapi, Héctor Ñancumil, quien precisó que "este curso ha sido un beneficio muy importante, porque nos servirá mucho en el uso doméstico".

En cuanto a los desafíos que vienen para isla Huapi, Ñancumil agregó que es necesario realizar un curso de conducción clase B, "porque acá también hay personas que tienen vehículos y así pueden salir a otros lugares", junto con recuperar la práctica del telar mapuche, "tradición ancestral que se ha perdido en esta zona".