"No habría podido hacer esta película con otra actriz que no fuera Mariana di Girolamo"
SAN SEBASTIÁN. Leonardo Medel exhibió "La Verónica" en muestra española.
Con una imagen casi permanente en primer plano y un personaje tan atractivo como odioso interpretado por una brillante Mariana di Girolamo, el cineasta nacional Leonardo Medel cuenta en "La Verónica" una historia diferente y experimental, que pone en cuestión el mundo de las redes sociales.
En la competición de Horizontes Latinos, en el marco del Festival de Cine de San Sebastián, en España, el realizador reconoce que "La Verónica" partió de una investigación sobre cómo hacer una película en primer plano.
Youtubers
El cineasta chileno unió en la parte estética las fotografías publicitarias de moda con el mundo de los youtubers, lo que conectó temáticamente con las redes sociales y con lo que significa el selfie como la forma de representación de nuestro tiempo.
Medel, admirador de la forma de tratar el rostro en las películas de Bergman y de Dreyer, asegura que "Juana de Arco es mi película favorita" y explica cómo articula una obra en 53 planos secuencia, consistentes en otros tantos primeros planos del semblante de la protagonista.
"La cercanía que tenemos con el rostro de Mariana en este trabajo cinematográfico tiene que ver con el concepto de los selfies, con los videos de YouTube; porque yo siempre he entendido esta película como un video de YouTube extendido", aclara el cineasta de 37 años, nacido en Concepción y casado, por cierto, con una "influencer".
Largo proyecto
Este concepto visual, Medel lo comenzó a trabajar hace ya 12 años, una tarea que le resultó muy compleja metodológicamente para conseguir construir toda una película alrededor de un primer plano. En 2008 grabó un teaser de la misma y en 2016 hizo un corto, ya con Di Girolamo en su proyecto, que le permitió experimentar y comprobar que era posible hacer un largometraje con esta particular idea.
"Con mi equipo tenemos todo un historial de películas extrañas", reconoce el director. Esos proyectos de corte "experimental, inédito e insólito" son algo fascinante para la actriz, que se sintió atraída hacia el trabajo de Medel por el hecho de que su personaje está todo el tiempo en ese primer plano, en una "intimidad casi pudorosa con la cámara".
Al juego con las expresiones del rostro de la protagonista se suma un curioso trabajo con los colores y las texturas de la imagen.
"Los colores base son café, negros, blancos, y sobre eso hay colores que se levantan", rojo, amarillo, colores saturados y vivos.
Di Girolamo trabajó mucho con el director en la forma de interpretar a un personaje, en apariencia frívolo y exhibicionista. Se probó la distancia con la cámara, el tono de voz y el cómo llegar a las emociones de manera rápida.
"Con Mariana significa un aprendizaje no solo respecto de lo que estábamos experimentando formalmente, también de quién es Mariana y qué tipo de actriz es. No habría podido hacer esta película con nadie más. Significa un nivel de rigor del que no habla porque ella es así, una actriz extremadamente rigurosa e inteligente en la forma en que aborda cada cosa que hace", destaca el realizador.
LA mirada de MARIANA
Di Girolamo interpreta a Verónica una famosa modelo chilena, muy activa en redes sociales, casada con una estrella del fútbol, con el que acaba de tener una niña.
Mientras ella se centra en su carrera -en la que busca alcanzar los dos millones de seguidores en su cuenta de Instagram- y su marido en la bebé, comienza una investigación sobre el asesinato de su primera hija, de la que ella es la principal sospechosa.
Verónica vive en una especie de realidad paralela, la creada en el mundo de los youtubers, algo muy generacional y que ha cobrado una dimensión difícil de entender, como resalta la actriz, que recuerda que al moderar una ponencia sobre este tema, pasó a "un quinto o sexto plano" frente a la popularidad de las youtubers con quienes compartía la charla.
Ese mundo con reglas propias y que resulta muy ajeno a quien no está dentro es lo que cuenta "La Verónica", una película que ha pasado por un complejo proceso hasta llegar a San Sebastián.
Inconvenientes
Esto, porque el rodaje del filme coincidió con el inicio del estallido social en Chile y tuvo que cambiar completamente de planificación, entre otras razones para que los miembros del equipo, tanto técnico como artístico, pudieran participar en las protestas, como era su deseo.
Hubo desabastecimiento que afectó al catering durante el rodaje y el toque de queda obligaba a recortar las jornadas de trabajo. Y poco después de acabar de filmar, llegó la pandemia y el confinamiento.
Por eso poder estar presentando la película en un festival es todo un éxito para Leonardo Medel y más aún tratándose de San Sebastián.
"Es un festival por el que han desfilado los mas grandes directores chilenos de los últimos años, desde Pablo Larraín, Pepa San Martín, Sebastián Lelio, Maite Alberdi (...)
No pensábamos que íbamos a estar aquí porque es una película de corte más experimental, no tan mainstream, fue una sorpresa increíble", cerró.