Incertidumbre y desconfianzas
Análisis nacionales y locales señalan que la comunidad se siente desorientada y pesimista frente a la situación actual. El panorama se dibuja oscuro a la luz de estos datos, pero los estudios son como una "fotografía" de un momento social; en ningún caso una sentencia.
La incertidumbre sobre el presente; pero también la esperanza en que el futuro traiga más paz, más igualdad y un desarrollo sustentable para Chile, son algunos de los resultados dados a conocer por un estudio realizado por la Fundación Encuentros del Futuro, con respaldo de empresas y del ministerio de Ciencia. El análisis fue aplicado en diversas regiones, captó más de 15 mil conversaciones y sus datos fueron procesados con máxima tecnología e inteligencia artificial.
A través de un comunicado público (www.estudiodialogos.cl) se explica que el análisis estuvo centrado en las sensaciones de los chilenos frente a la realidad actual y que la principal de ellas, expresada por el 38% de los entrevistados, es de "incertidumbre"; percepción que subió notoriamente desde el 29% obtenido en febrero a través del mismo sistema. Luego, las sensaciones más reiteradas son "miedo" e "inestabilidad" (laboral, social, económica, espiritual) y todas se presentan más altas entre las mujeres participantes.
El documento también indica que una de cada tres personas menciona querer un futuro "más justo" y que la mayoría (34%) sabe que la realidad va a cambiar a mediano plazo. Llama atención, además, que 14% los encuestados de la zona sur austral indican que ese cambio será en la relación con el medioambiente.
Estos antecedentes -en especial los negativos, lamentablemente- coinciden con los obtenidos en Los Ríos hace pocos meses por el Indice de Confianza en la Economía Regional (Icer), realizado por la escuela de Ingeniería Comercial de la USS Valdivia y que reveló que hoy tenemos el menor grado de credibilidad en la situación local, registrado por el mismo instrumento, desde 2011.
El panorama se dibuja bastante oscuro a la luz de estos datos, pero no se debe olvidar que los estudios son como una "fotografía" de un momento social; en ningún caso una sentencia. Muestran desafíos para enfrentar. También constituyen orientaciones para quienes toman las decisiones y para quienes construyen los mensajes para comunicarlas, sobre todo para que velen por la coherencia entre ellas. Más de una voz, confunde y eso ahonda la desorientación.