Día de las mujeres y niñas en ciencias
La Unesco invita cada 11 de febrero a mirar el trabajo femenino en la investigación y también el acceso a carreras del área. En Latinoamérica, la participación de las mujeres en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM) es de 44% . En Chile es de 38%, uno de los más bajos.
Este 11 de febrero es el Día Internacional de la Mujer y de la Niña en Ciencias. Se trata de una fecha propuesta por la Unesco (Naciones Unidas para la Educación) desde 2015 y busca reconocer los aportes femeninos, además de promover la apertura de él a nuevas generaciones.
El tema es necesario. Este campo se hace clave para avanzar en desarrollo sustentable y también en salud, tal como ha quedado demostrado con la pandemia; y para ello requiere de todas las personas que puedan contribuir. Sin embargo, sólo un 30% del total de investigadores en el mundo -de acuerdo a la Unesco- y un 3% de los ganadores de Premio Nobel, son mujeres.
El índice más bajo de presencia femenina en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM) está en Asia, con 18%; pero en los países árabes llega al 39,8% y en Dinamarca alcanza al 51%. En Latinoamérica se habla de 44% de mientras que en Chile es de 38%, superado por Argentina (53%) y Venezuela (56%). Además, a nivel nacional, un 5% de las mujeres trabaja en áreas de Tecnologías; las matriculadas en carreras STEM en las universidades chilenas son 1 de cada 4, y quienes lo hacen, a menudo no alcanzan puestos de dirección, ni apoyo para sus labores (SernamEg). Conycit reporta 39,9% de proyectos liderados por mujeres.
En Los Ríos, solamente una "mechona" de cada diez alumnos de primer año universitario ingresa a una carrera del área; pero hay diversas iniciativas en las casas de estudio, a través del Programa Par Explora y de la Red de Investigadoras, para direccionar talentos hacia allá, realizando charlas, visibilizando el trabajo de las científicas locales y fomentando en las escuelas una educación no sexista, que estimule la indagación, el pensamiento crítico y la participación.
Claramente son muchos los temas para reflexionar este jueves y la tarea corresponde tanto a los organismos oficiales como a las familias, para reconocer los errores de la formación que excluye y autoimpone límites a través de los roles sociales.
Es urgente contribuir, pues con el ritmo actual de avances se alcanzaría paridad en el año 2263. Y esperar más de dos siglos es demasiado, para un país que necesita crecer en esas materias para desarrollarse mejor.