Vacunas: alianza busca que el país vuelva a producir más de 25 millones de dosis al año
RED DE CENTROS I+D. Acuerdo fue firmado por las universidades de Antofagasta, de Chile y Católica de Chile, el Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia y el Gobierno Regional de Antofagasta.
Volver a producir vacunas en Chile, llegando a manufacturar al menos 25 millones de dosis anuales, es el fin último del convenio de colaboración que firmaron ayer las universidades de Antofagasta, de Chile y Católica de Chile (PUC), el Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia (IMII) y el Gobierno Regional de Antofagasta.
El acuerdo dio inicio a un proyecto que apunta a contar con una red de centros I+D (investigación y desarrollo) y que tendrá financiamiento público y privado, además del patrocinio de las propias universidades.
"Llevamos varios años en esta senda", mencionó el rector (s) de la universidad nortina, Carlos Cabezas. En 2017, la casa de estudios se adjudicó el proyecto de creación del Atacama Desert Vaccine Laboratory, para la producción de vacunas y el diseño de una planta de manufactura de vacunas y sueros. La institución aspira a implementar un centro productor de vacunas.
Cooperación
"Es destacable que este tipo de iniciativas convoquen a las principales universidades del país, a centros de investigación, a las autoridades regionales y ministeriales, en torno a la generación de nuevos conocimientos en lo científico y tecnológico", agregó Cabezas. De hecho, la PUC, la Universidad de Chile y el IMII han estado involucradas en ensayos clínicos de vacunas contra el covid-19 en el país y en la importación de la fórmula de Sinovac.
El ministro de Salud, Enrique Paris, agradeció "los esfuerzos que se han hecho en las universidades y el trabajo colaborativo de los centros de investigación" para que Chile pudiera establecer vínculos cercanos con productores de vacunas. "Eso ha sido reconocido de forma unánime. La manufactura de vacunas en Chile es un sueño que tenemos que cumplir", dijo. Agregó que el convenio es "un paso gigantesco, una luz de esperanza", y que teniendo ya implementada la producción de vacunas, "vamos a favorecer a nuestros hermanos latinoamericanos".
Para el doctor en microbiología e inmunología Alexis Kalergis, director del IMII, "es importante tener en cuenta que esta (la del coronavirus) no es la primera ni será la última pandemia, por lo que debemos como país comenzar a trabajar en implementar mecanismos para el desarrollo, manufactura y distribución de vacunas seguras y de alta calidad en Chile".
Escenarios
Kalergis dijo que se podría llegar a producir entre 30 y 40 millones de dosis anuales en "plantas que pueden trabajar de manera continua" y que la idea es "tener el número de dosis que se necesita en Chile para ciertas vacunas". Agregó que esto abre la opción de hacer transferencia tecnológica, estableciendo acuerdos con productores de vacunas que pudieren manufacturarlas en nuestro país.
El científico explicó que la Universidad de Antofagasta ya tiene implementados algunos laboratorios para la creación de algunas vacunas. "La etapa que viene es la implementación de laboratorios y espacios que permitan implementar manufacturar vacunas con los estándares del ISP (Instituto de Salud Pública)", expuso.
Margarita Lay, académica de la Universidad de Antofagasta e investigadora del IMMI, indicó que "se ha estado trabajando en estimaciones económicas" para ver la factibilidad de producir vacunas en Chile. Para un plan de manufactura que incluya hasta el llenado y envasado de vacunas, se necesitan "entre 25 y 30 mil millones de pesos", lo que permitiría producir al año 25 millones de dosis, dijo la doctora. "Además del llenado y del envasado, si queremos desarrollar la tecnología para el producto final, estaríamos hablando de 50 mil millones de pesos chilenos para producir 25 millones de dosis al año", añadió.
Carlos Saffie, director de Innovación de la Universidad de Chile, dijo que "estamos analizando varios macroescenarios", incluyendo producir "20 millones de dosis anuales" a un costo de 50 millones de dólares.
"Hoy estamos dando un gran paso en el reinicio de la producción y generación de vacunas en nuestro país", destacó el rector de la PUC, Ignacio Sánchez. "Fue un error nacional haber desmantelado un centro de vacunas que teníamos con el argumento de que era más barato comprar las vacunas afuera", sostuvo el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi.
"La producción de vacunas continuó en el ISP hasta 2002 y cesó por problemas técnicos y de infraestructura. Desde entonces se importan", generando "un alto gasto de presupuesto y dependencia del extranjero", afirmó Margarita Lay.
2002 el Instituto de Salud Público dejó de producir vacunas en Chile, afirma la doctora Margarita Lay.