Los diálogos que Paulina Flores encontró en el mar
"Isla Decepción" (Seix Barral) es el debut novelístico de la escritora chilena. En él narra la huida de un coreano que se refugia en el Estrecho de Magallanes. Las voces de los marinos las buscó en un puerto.
En abril de este año Paulina Flores fue seleccionada por la revista Granta como una de las mejores escritoras jóvenes en español.
Hay una vida secreta en los barcos factoría pesqueros que recorren el mundo que incluso van más allá de la ley. Esa realidad, muy presente cerca de nuestras costas, fue la que decidió contar e investigar la escritora Paulina Flores (1988).
Su ficción parte con el hallazgo de un hombre de rasgos orientales en las gélidas aguas del Estrecho de Magallanes. El asiático es cobijado por un tripulante en Punta Arenas. En paralelo, la hija de este tripulante renuncia a un buen trabajo en Santiago y vuelve a la casa de su padre en el sur, para encontrar a este refugiado y conformar el trío de protagonistas de "Isla Decepción" (Seix Barral).
El libro anterior de Paulina Flores fue uno de los mayores impactos de la literatura chilena de los últimos años. "Qué vergüenza" (Hueders) obtuvo el Premio Roberto Bolaño para escritores jóvenes, el Premio Municipal de Literatura de Santiago y el del Círculo de Críticos de Arte. Reeditado en España, fue considerado por el diario El País uno de los libros del año. En ambos países se reconoció la madurez de su debut. Este año, además, fue considerada por la Revista Granta, prestigiosa publicación inglesa, como una de los 25 mejores escritores en español bajo los 35 años.
La escritora dio un salto a un barco complejo, el de la novela, y lo dio con vívidas escenas portuarias. Tal como la de sus personajes, no fue una navegación fácil. "Fue heavy. Un proceso largo. Pasé por todas las emociones, todas las sensaciones. Yo creo que la reescribí como tres veces. Fue fuerte, tuve que trabajar mucho. Me acuerdo de un año en específico que hacía eso no más durante todo el día. Tenía mucha ansiedad, dormía poco", cuenta.
Palabra a palabra
Dice Paulina Flores que su escritura no fue una navegación tranquila. De hecho, tuvo que salir a buscar la historia lejos. Viajar hacia los puertos australes de Chile.
"Pero era muy feliz escribiendo. Cada día disfrutaba. Es un trabajo que hice muy de palabra a palabra, frase a frase, me preocupaba mucho de eso, a veces podía escribir un párrafo, a veces podía escribir más, pero generalmente escribía muy poquito, porque era un proceso muy (vinculado) con la elección de las palabras. Y nada, la historia, cuando comencé a escribirla sabía cómo partía pero no tenía idea cómo terminaba, entonces, eso me daba vértigo, no saber, ir avanzando en la historia y no tener un plan. Eso era vertiginoso, porque hay una parte de mi bastante práctica, pero era genial. Cuando ya supe el final de la novela fue sacarme un peso de encima y una de las cosas más bonitas que viví. Fue un viaje, un proceso. Me fui de Santiago a buscar inspiración", recalca la autora.
-¿Llegaste a puerto finalmente?
-Al final de la novela, cuando la estaba terminando, me empecé a obsesionar con (el cineasta) Raúl Ruiz. Con la forma en que él generaba los diálogo de sus personajes.
Isla Decepción
Paulina Flores
Seix Barral
362 páginas
$16 mil
Por Cristóbal Gaete
"Con los pescadores quería salir del cliché de estos hombres rudos. Recuerdo haber entrevistado a muchos pescadores, marinos mercantes también, y vi en ellos bastante ternura".
Diego Urbina