Luego de un controversial inicio, la esperada Convención Constituyente (CC) logró constituirse y comenzar con sus primeras sesiones. Discusiones en torno a la conformación de la mesa, construcción de reglamentos y coordinación en torno a protocolos Covid se tomaron la agenda inicial. La CC necesitará un tiempo para poder acordar el reglamento interno de funcionamiento, lo cual dará el puntapié inicial para comenzar con las discusiones en torno a los contenidos que abordará la nueva Constitución.
Junto con este importante proceso socio político, estamos viviendo los efectos de la crisis sanitaría del Covid 19. Esta semana se publicaron los resultados de la encuesta Casen 2020, la cual reveló que por primera vez en 20 años el índice de pobreza aumentó llegando a un 10,8%. La región de Los Ríos no es indiferente a esta realidad y dentro de los resultados de la encuesta se registró un índice de pobreza superior al promedio nacional (12,2%) además de ser la tercera región con mayor cantidad de entrega de subsidios económicos del país.
Es importante entender que las realidades de las diferentes regiones, comunas y localidades de Chile reaccionan de manera diferenciada a las crisis. En este caso, es probable que el aumento del índice de pobreza y el alto número de personas que han solicitado apoyo económico por medio de los bonos ofrecidos por el Estado, tenga relación con la imposibilidad que ha existido hasta ahora en el territorio de activar con mayor fuerza ciertos rubros económicos, como el gastronómico, al cual dada las condiciones climáticas, le era imposible cumplir con requisitos como el de atender en terrazas. La CC fijará una nueva normativa constitucional donde temáticas referidas a la orgánica estatal, principio de descentralización y desconcentración, régimen de gobierno, entre otros, serán profundamente abarcados y analizados. La elección territorial de los constituyentes permitirá elevar las necesidades propias de cada región con miras a lograr generar una nueva Constitución que entienda que es necesario avanzar hacia procesos de regionalización del poder central. En concreto, esperamos que por medio de este nuevo gran acuerdo social se llegue al entendimiento de que son los propios habitantes de las regiones quienes mejor entienden y, por ende, pueden resolver ciertos problemas o conflictos territoriales y desplegar sus vocaciones. La CC sin dudas, es un camino hacia una nueva realidad, para un nuevo Chile, y confiamos que logrará sistematizar y converger en un texto que nos permita mirar hacia un nuevo futuro, distinto y común.
"Confiamos en que la Convención logrará sistematizar y converger un texto que nos permita mirar hacia un futuro, distinto y común..."