"Nuestra historia como club nos obliga siempre a pelear todos los campeonatos"
Solamente un par de días de descanso y el Deportivo Valdivia regresa hoy a los entrenamientos, tras un nuevo objetivo en su campaña de la temporada 2021, en la Liga Nacional de Básquetbol. La victoria 3-1 ante Las Ánimas en la final de la Conferencia Sur catapultó a los albirrojos a la final nacional. Su rival será el campeón de la Conferencia Centro, donde al cierre de esta edición se enfrentaban Los Leones de Quilpué y la Universidad de Concepción, con ventaja de 2-1 para los penquistas.
El técnico valdiviano Juan Manuel Córdoba abordó ayer los factores que lo instalan en la disputa del título, con la esperanza de reverdecer los laureles ya alcanzados en las temporadas 2015-2016 y 2018-2019, cuando llevó al CDV al título de la Liga Nacional, primero ante la Universidad de Concepción y luego ante Los Leones.
En cancha
¿Cuál es su balance de la temporada hasta el momento?
-Estamos muy contentos por haber conseguido el campeonato de la Conferencia Sur. Sabemos que ha sido un año difícil, porque hemos tenido que adaptarnos a diferentes conformaciones que ha tenido el equipo y hemos ido creciendo a través de la competencia, para llegar a nuestro mejor rendimiento. Esperamos seguir igual.
¿La principal dificultad ha sido lo ocurrido con los extranjeros?
-Es uno de los tantos problemas que hemos tenido. Primero tuvimos mucho tiempo entrenando a los chicos de doble nacionalidad, porque no salían los papeles y eso generaba ansiedad. Además, Sebastián Suárez se lesionó al comienzo de la Copa Chile y luego cuando estuvo en la selección; el primer extranjero (Tyrone Nash) no rindió lo que esperábamos y el segundo (Khapri Alston) se fue antes de tiempo. Además está todo lo que implica los problemas de la pandemia.
¿También ha influido que el equipo esté renovado respecto a la temporada anterior?
-Es un equipo nuevo. De los 12 integrantes del año pasado, hay 10 jugadores nuevos y no es tan fácil encontrar la química colectiva en un corto plazo y con distintas conformaciones del equipo. Todo esto nos ayudó a entender que necesitábamos optimizar nuestro trabajo colectivo y que los jugadores jóvenes debían asumir responsabilidades. Ante los diferentes tipos de problemas, pudimos sacar fortalezas y aprovechar las oportunidades, ya que los chicos se fueron adaptando y mejorando en el transcurso de la competencia.
¿Qué fue lo más complicado de la serie con Las Ánimas?
-Todo. Las Ánimas fue el mejor equipo de la fase regular. Nos ganaron los cuatro partidos de esa etapa; tiene a Franco Morales, que es el base titular de la selección; Cristian Amicucci es uno de los mejores extranjeros de la liga; Claudio Naranjo tuvo una temporada brillante; Low, Del Solar y Soto tienen por lo menos dos o tres años de trabajo juntos y eso ayuda a acoplarse rápido en el comienzo. Las Ánimas fue un rival durísimo, que nos exigió al máximo de nuestras posibilidades físicas, técnicas y tácticas para quedarnos con la serie.
¿El CDV tuvo más variantes o un equipo "más largo"?
-Pero no tenemos extranjero. Lo corto o largo de la banca depende de las oportunidades que tengan los jugadores. Quizás en esta serie tuvimos un plantel con más reparto de minutos.
Van de nuevo por el título?
-Lo he dicho. El CDV siempre tiene que ir por todo, tiene la mejor hinchada del básquetbol chileno y tiene un historia y un presente. Desde 2015 es el equipo que más ha ganado a nivel nacional. Nuestra historia como club nos obliga siempre a pelear todos los campeonatos. En la final y al igual como ocurrió con Las Ánimas, no hay que perder la humildad, tenemos que trabajar colectivamente y suplir la ausencia del extranjero con trabajo colectivo. Estamos muy contentos con nuestro presente, vamos a llegar al último día del torneo y nos vamos a preparar con toda la ilusión de quedarnos con el campeonato.
"Necesitábamos optimizar nuestro trabajo colectivo y que los jugadores jóvenes debían asumir responsabilidades...".
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