Presentan nuevo diseño para edificio de centro de rehabilitación para ciegos
AVANCES. Arquitectos locales actualizaron proyecto que está en desarrollo desde hace cuatro años. El recinto y los distintos servicios que entregará, beneficiará a cerca de 30 personas.
En la sede social de la Junta de Vecinos Teniente Merino se realizó un encuentro en el que se presentó nuevos antecedentes del proyecto de creación de un centro de rehabilitación para personas con discapacidad visual. La iniciativa surgió en 2017, del vínculo entre la Organización Ciegos del Sur que preside María Cristina Martínez, y el arquitecto Fernando Huenchullanca, magister en diseño de entornos sustentables.
En ese momento se planteó la necesidad de contar con un recinto especialmente pensado en quienes tienen ceguera total o distintos niveles de pérdida de la visión, para que puedan recibir terapia.
Originalmente se propuso un edificio de aproximadamente 900 metros cuadrados, de tres niveles, una sala de Braille y otra de computación, entre otros avances.
El proyecto debió ser actualizado atendiendo a razones económicas, por lo que ahora se busca concretar una construcción de 220 metros cuadrados, que servirá de base para proyectar ampliaciones. La propuesta está en etapa de discusión con los integrantes de Ciegos del Sur y su viabilidad financiera es algo que se discutirá con instituciones públicas y privadas, durante los próximos meses. La inversión estimada sería de $200 millones, para un espacio que será usado por cerca de 30 personas.
"El centro de rehabilitación sigue siendo un anhelo de larga espera, que ahora logramos integrar a los temas de interés de la nueva administración municipal. Las modificaciones planteadas tienen que ver con facilitar el acceso a los financiamientos y en ese sentido es que el desafío fue repensar los espacios, sin que pierdan el uso para el cual se necesitan", dice Huenchullanca.
La construcción sigue pensada para el sector Teniente Merino, que es donde está la sede de Ciegos del Sur.
"De esta forma, no se perderá el sentido de territorialidad de la institución y se estará contribuyendo a la descentralización de los servicios del centro urbano, que tiene una congestión no menor. Contamos con un entorno con una gran potencialidad espacial, que vale la pena desarrollar con un proyecto de base que nos permitirá expandirnos acorde a las necesidades", explica el arquitecto.
Inclusión
En la actualización de la propuesta están involucradas las oficinas Cero + Al (Fernando Huenchullanca y Esteban Jiménez), (Dagmar Üwe) y CS Arq (Cristóbal Seguel).
Pese a los cambios al diseño originalmente propuesto, se mantienen máximas como por ejemplo velar por el aislamiento térmico, las buenas condiciones de iluminación (favorecidas por el entorno natural) y alturas adecuadas de espacios interiores (el edificio tiene un alto de 5 metros en su fachada principal y llega a 3 metros en su fachada posterior).
Además de oficinas administrativas, igualmente se proponen salas multipropósito para labores de rehabilitación e incluso, no se descarta la generar inclusión a través de una sala para la exhibición de obras de arte. Aquello se podría concretar gracias a la relación profesional de Fernando Huenchullanca con el Museo de Arte Contemporáneo, MAC
De concretarse la construcción, igualmente surgirá la necesidad de contratar profesionales para distintas labores, abriéndose la alternativa de que el centro se vuelva un lugar de atención para usuarios de Valdivia y la macro zona sur.
"Las modificaciones planteadas tienen que ver con facilitar el acceso a los financiamientos y en ese sentido es que el desafío fue repensar los espacios, sin que pierdan el uso para el cual se necesitan".
Fernando Huenchullanca, Arquitecto
200 millones de pesos es el costo aproximado de la inversión para el edificio proyectado en Valdivia.
2017 es el año en que el arquitecto Fernando Huenchullanca y Ciegos del Sur iniciaron la idea.
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