Una búsqueda muy dolorosa
La situación que vive la familia de Yordan Fernández es similar a la de muchos. En los últimos dos años, 19 personas de Los Ríos se han perdido sin dejar rastros. Un proyecto para crear un sistema unificado y moderno de búsqueda de personas pasó a segundo trámite constitucional en el Senado.
La dolorosa búsqueda que mantiene hace 24 años la familia de Yordan Fernández Ruíz, conmueve a quien la conoce. El joven salió de su casa, ubicada en Ignao, el domingo 14 de diciembre de 1997 rumbo a La Unión, donde estaba interno como alumno del Liceo Industrial; asistió a clases dos días y ya desde el martes 16 se perdió su rastro.
Sus padres lo esperaron de regreso el 19 de diciembre, pero no llegó. Desde entonces, ellos no han dejado de tocar puertas y hacer diligencias para encontrarlo; la más reciente fue la excavación efectuada por expertos del Servicio Médico Legal durante esta semana en el patio del mismo colegio. No conocen todavía los resultados, pero saben que seguirán indagando. De hecho Ruperto Fernández, el padre de Yordan, pidió a sus compañeros de curso y a las personas que trabajaban en el colegio en esa época que les ayuden con datos que puedan tener.
El caso es uno de muchos que se repiten en Chile con frecuencia. En 2020, la PDI recibió 8.824 órdenes de investigar extravíos y en los primeros 6 meses de 2021, la cifra fue 12.841. De ese total, el año pasado fueron halladas 7.977 personas y este año, 3.671. En Los Ríos los totales marcan 199 personas perdidas, con 189 casos solucionados (2020) y 76 denuncias en 2021, con 67 solucionadas (pdi.cl). Es decir, en los últimos dos años, hay 19 habitantes de la región cuyo rastro se perdió.
Además de esa triste realidad, también son complejos los procedimientos que los afectados deben seguir. Si bien los operativos se activan apenas se reciben las denuncias, la información sobre las causas a veces se dispersa entre varias instituciones y demora su abordaje, pues no hay en el país un sistema unificado de búsqueda. Un proyecto de ley para crearlo se encuentra en el Congreso desde 2019 y pasó a su segundo trámite constitucional en el Senado el 30 de noviembre recién pasado, de modo que podría pronto ser aprobado. Es de esperar que así sea, pues se podría entonces disponer de normas más claras y la provisión de las tecnologías necesarias para sumar antecedentes. Y esto es crucial, pues si no hay avances con pistas confiables, las causas se cierran hasta que surgen nuevos indicios; pero pueden pasar años antes de que eso ocurra. Yordan es un ejemplo.