En noviembre del año pasado, Virginia Valeska Núñez Alveal asumió como presidenta del Club de Remeros Arturo Prat de Valdivia, siendo la segunda mujer en tener esa responsabilidad en los 133 años de historia de las "Palas Blancas".

Emprendedora y actualmente animadora de televisión, la valdiviana de 49 años llegó a la club deportivo durante 2017 motivada por el interés de su hijo (Mario Bitelbick) a la disciplina.

Lo que en un comienzo fue una obligación por ser apoderada -asegura-, hoy se convirtió en un amor incondicional por la institución y por la disciplina.

¿Cómo ha sido este proceso como dirigenta deportiva del Club de Remo Arturo Prat?

-El proceso ha sido nuevo para mí ya que nunca había estado frente a un club y con tanta responsabilidad que significa dirigir a tantos chicos y chicas. La experiencia en este proceso, donde recién llevo cinco meses, los he tomado con calma y con mucho sueño, ya que hay días en que quiero hacerlo todo de un golpe, pero ahí es donde me doy cuenta que dirigir un club y poder hacer los cambios, requiere de tiempo.

También en este proceso he intentado incorporar a mucha gente que pueda colaborar en diferentes ámbitos, además de tener una directiva que pueda trabajar a la par conmigo, al igual que los socios y apoderados del club, con el fin de hacer que la institución funcione como un conjunto de personas con ideas y también escuchando la opinión de todos, lo que incluye a nuestros deportistas.

¿Cómo definiría al Club de Remeros Arturo Prat?

-A pesar de las adversidades y muchas deficiencias que mantiene hoy en día, al igual que muchos otros clubes, como por ejemplo infraestructura y en botes, el Club Arturo Prat es una familia que si tiene que levantarse de un problema se levanta, una familia que si tiene que ir a gritar por sus remeros a las 7 de la mañana lo va hacer con lluvia, frío o lo que sea. El Club tiene una identidad de amor, que llevándolo a un ejemplo más simple, ocurre todos los días luego de los entrenamientos, donde todos los chicos y chicas se quedan a compartir. Se quieren y respetan mucho entre todos.

Por último, puedo decir que el Club es cuna de grandes campeones y más que eso, es cuna de grandes personas, de la cual estoy muy orgullosa de pertenecer junto a mi familia.

Siempre se ha dicho que Valdivia es la cuna del remo en Chile ¿es tan así hoy en día?

-Obviamente que Valdivia sigue siendo la cuna del remo chileno, aunque eso no quiere decir que las otras asociaciones no estén haciendo lo suyo. Yo creo que todos los deportistas, tanto de Valdivia y nuestra región como también de Puerto Montt, Llanquihue, Valparaíso, Viña del Mar y Concepción, entre otros, se preparan para ganar. En ese sentido, los clubes de otras regiones han ido mejorando en diferentes ámbitos, como en lo administrativo, infraestructura y por supuesto en lo deportivo y en sus resultados, pero independientemente de aquello seguimos siendo un referente importante del remo en Chile.

Hace muchos años tuvimos a dos campeones mundiales y ahora en plena pandemia tuvimos dos nuevos campeones como Roberto Liewald del Club Phoenix-Valdivia y Manuel Fernández de nuestro club. Para qué voy a nombrar la cantidad de remeros y remeras que han sido campeones sudamericanos u otro evento internacional que se mantienen vigentes. Si ven las nóminas de las selecciones, siempre la mitad o más de los integrantes son de nuestra región, lo que incluye la parte técnica. Esto es clara señal de la importancia de Valdivia, sin desmerecer el importante trabajo y evolución de las otras asociaciones.

¿Hay necesidades en el remo regional?

-Por supuesto, si bien seguimos siendo una potencia a nivel nacional, no debemos bajar los brazos para seguir siendo com.

"Creo que ese día era una deuda que teníamos con la ciudad de Valdivia. No sé si las autoridades o nosotros la gente del remo, no hemos sido capaces de levantar la mano y decir que el remo se merece un día comunal. Estamos muy contentos por la decisión que tomó la alcaldesa Carla Amtmann de rendir un homenaje al remo el día 10 de julio, que fue el día que Roberto Liewald y Manuel Fernández ganaron el campeonato mundial Sub-23. Nos sentimos orgullosos de esa fecha, y a la vez, nos parece importante destacar ese día, porque no es en el verano sino que es en pleno invierno, lo que es una muestra de que este deporte se desarrolla durante todo el año, sin importar las condiciones del clima. Es importante que en esa fecha también se realce la actividad del remo, me parece espectacular que sea en julio. De todos modos esto tiene que ir de la mano con anuncios que beneficien a los clubes de la ciudad y su desarrollo deportivo", enfatizó la dirigenta.