Juan Carlos Hernández G.

Una vida de servicio público es la que atesora Lorenzo Lorca Camus, entre recuerdos y emociones presentes. El pasado 1 de abril pasó oficialmente al equipo de los jubilados, colocando fin a una historia de más de 46 años de trabajo que se remonta a fines del año 1975, cuando ingresó a trabajar a la Tesorería Comunal de Puente Alto. De allí pasó a la tesorería de San Bernardo y en 1979 retornó al Calle Calle, para incorporarse a la tesorería provincial.

En enero de 1982 se formó la tesorería municipal valdiviana, dependiente del Departamento de Administración y Finanzas, y Lorenzo Lorca se sumó a ese equipo de trabajo, comenzando una carrera que lo llevó a desempeñarse en Bienes Raíces, el Departamento de Ingresos, la Piscina Aqua, el Terminal de Buses y desde 1984 en el Departamento de Inspección Municipal.

Paralelamente, se identificó con Club de Deportes Las Ánimas, institución en la cual fue jugador de fútbol y básquetbol, presidente y donde actualmente es secretario.

"Soy un agradecido de haber ingresado al Servicio de Tesorería, porque como siempre he dicho: ser empleado público, fue muy agradable. En el servicio público se aprende de los colegas el trabajo y la forma cómo atender a un ciudadano, conocimiento que después, uno traslada a los colegas más jóvenes", señala.

En el comienzo del descanso, ¿qué balance realiza de su trayectoria como funcionario municipal?

-Me voy conforme en la parte personal, conforme con mi actuar, porque entregué todo lo que fue posible por la comuna y por mi ciudad. Cuando el funcionario es nacido y criado acá, es como vestir la camiseta de Valdivia. Hay una imagen que cuidar y un compromiso que cumplir. Muchas veces, uno puede aparecer como un Quijote, porque se preocupa de detalles que pueden hacer las grandes cosas, pero que se dejan pasar.

¿A qué se refiere?

-Por ejemplo, el problema de los microbasurales en distintas partes de la ciudad: siempre he comentado con los colegas, que como es un tema que no se han tocado en forma drástica y constante, la gente cree que hace lo correcto, porque no se da a conocer y no se insiste en las prohibiciones existentes. Creo que así la gente se daría cuenta que lo está haciendo mal. Son pocos y de verdad, da pena e impotencia ver que hay un servicio de recolección de basura, que muchas veces es gratuito, pero no es bien aprovechado. Esas cosas dejan un sabor amargo, porque pese a que hay muchas personas que hacen un esfuerzo para que la ciudadanía esté mejor, lamentablemente no se logra el objetivo.

¿Cuándo y cómo se desarrolló su nexo con Club de Deportes Las Ánimas?

-Recuerdo que tenía como cinco años cuando comencé a relacionarme con la antigua cancha de Sedeño, cuando mi padre era presidente del Unión Las Ánimas, que después se unió con el club de boxeo Fernandito y dieron origen al actual club. Como futbolista, fui jugador desde los infantiles con el gran Ricardo Reyes, juveniles, cadetes y adulto. Ganamos varios títulos. Pero, al mismo tiempo me desarrollé como basquetbolista, jugué hasta la serie adulta y fui seleccionado valdiviano, campeón en el Provincias del Sur de 1974.

¿Y como dirigente?

-Cuando en 1994 Luis Marcoleta hizo una escuela de fútbol, me uní como padre de dos hijos y después de ver mi preocupación por las condiciones en que estaba el gimnasio, algunos socios me propusieron para el directorio. Fui como candidato, me eligieron presidente y fui reelegido hasta cumplir siete periodos. Luego dejé de participar y ahora, en la directiva que preside José Méndez he sido director y secretario.

¿Cuál ha sido su mayor alegría como dirigente de Las Ánimas?

-El título de la Liga Nacional de Básquetbol y después quedar entre los ocho mejores clubes de América. Esta es una institución de barrio que quiere hacer cosas y los jugadores cuando llegan, se impregnan de ese espíritu de sacrificio, porque se hace lo mejor para que ellos estén bien. También destaco la posibilidad de estar con Las Ánimas como representante del fútbol de Valdivia en la Tercera División y que significó que varios jugadores del club y la ciudad jugaran en esa categoría. Esos logros quedan en la historia del club.

"Me voy agradecido de quienes fueron mis colegas en Tesorería en su tiempo y después en la municipalidad. Espero seguir desarrollando algunas actividades privadas...".

Lorenzo Lorca Camus, Ex funcionario municipal y, dirigente del club Las Ánimas

Animeño Lorenzo Ricardo Lorca Camus nació en Valdivia el 22 de febrero de 1953, en el seno de una familia en la cual su padre José Segundo Lorca Lorca fue presidente del antiguo club Unión Las Ánimas. Su madre fue Hilda del Carmen Camus Marambio y es el cuarto de cinco hermanos: José Gabriel, Celia Isabel, Hilda Patricia, Lorenzo Ricardo y Dora Ester. En el aspecto formativo, realizó sus estudios primarios en la Escuela N° 24 de Las Ánimas y la Escuela N° 1; los secundarios en el Instituto Comercial, la Escuela Industrial y la Escuela de Artes y Oficios de la Universidad Técnica del Estado (UTE), en la especialidad de Electricidad. Luego de un año como estudiante en la sede valdiviana de la UTE, ingresó a la vida laboral. Casado con María Cecilia Fuentealba Schuler, tienen cuatro hijos y cinco nietos.

La alimentación de los adultos mayores debe ser nutritiva y equilibrada. Es decir, una alimentación que les permita cubrir sus necesidades nutricionales de energía, proteínas, lípidos o grasas, vitaminas y minerales. Todo ello para lograr un óptimo estado de salud y un peso corporal adecuado, evitando la aparición de enfermedades relacionadas con nutrición.

Llevar a cabo hábitos alimentarios saludables resulta complejo, ya que a medida que se incrementa la edad, aumentan los problemas de salud, lo cual encarece el presupuesto debido a que aparecen los gastos en medicamentos y atención de salud.

Con una adecuada selección de los alimentos y con algunos consejos, podemos contribuir a mejorar la calidad de la alimentación de nuestros adultos mayores.

Estos incluyen una planificación de menú semanal y la preparación de listas de compra de alimentos con antelación. Esto, para evitar que se tome la decisión de compra de alimentos innecesarios y de forma impulsiva en supermercados o locales comerciales. También, preferir la adquisición de alimentos naturales y no pre-elaborados, ya que resulta mejor cocinarlos en casa por calidad y precio. Otro consejo es cotizar alimentos de alto costo como carnes y lácteos en salas de venta o frigoríficos, que son más baratos. Además, preferir la compra de frutas y verduras de estación y en ferias libres, lo que resulta más conveniente.

Con los alimentos y verduras adquiridas se puede hacer diversas preparaciones como guisos, sopas, cremas de carne y verduras, ideales para consumir en invierno. Además, es importante aprovechar las verduras y alimentos perecibles, con un adecuado almacenamiento en condiciones de refrigeración y planificación de menús semanales, no eliminar nada y utilizar, por ejemplo, las verduras y frutas en riesgo de descomposición para conservas, cremas de verduras, tortillas, budines, postres, galletas para el desayuno, etc.

Massiel

Salazar

Dir. carrera Nutrición y Dietética UST sede Valdivia