Macron, Scholz, Draghi y Iohannis visitan Kiev y dan fuerte respaldo a su ingreso a la Unión Europea
UCRANIA. Los líderes de las principales economías europeas se reunieron con Volodimir Zelenski y comprometieron más ayuda militar. Fue un viaje "solidario"
Agencias
Los jefes de Gobierno de Alemania, Francia, Italia y Rumania anunciaron su apoyo a que Ucrania reciba el estatus de país candidato a integrarse en la Unión Europea, en una visita conjunta a Kiev inédita desde la invasión rusa del pasado 24 de febrero.
Tras reunirse con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, los cuatro precisaron que está a favor de que Ucrania obtenga de inmediato este estatus, en vísperas de que el Consejo Europeo trate el tema en Bruselas.
"Europa está de su lado y lo estará todo el tiempo que haga falta hasta la victoria", proclamó el francés Emmanuel Macron en una rueda de prensa.
El canciller alemán, Olaf Scholz, recordó que la decisión de aceptar a Ucrania como candidata requiere el consenso de los 27 miembros y añadió que Alemania respalda una "decisión positiva" también para la República de Moldavia. Luego instó a acelerar el proceso de ampliación en los Balcanes.
Subrayó que los países que desean integrarse en el bloque deben cumplir unos "criterios claros", que incluyen por ejemplo el respeto a las instituciones democráticas y al Estado de derecho, valores que "distinguen de otros" a la UE.
El primer ministro italiano, Mario Draghi, indicó que esta vía deberá ver "reformas profundas" en la sociedad ucraniana, que, sin embargo, "defiende cada día los valores de la democracia y la libertad en que se basa el proyecto europeo".
Zelenski reiteró que su país eligió el camino de la integración en Europa, vía cuya "corrección" está "históricamente comprobada", e indicó que Kiev aspira a convertirse en un "socio de fiar" que sea miembro de pleno derecho de la Unión. "La mayoría de la población del continente apoya nuestras aspiraciones," enfatizó.
Armas
Los cinco jefes de Gobierno también trataron el tema del suministro de armas para reforzar las capacidades de defensa de las Fuerzas Armadas ucranianas y Zelenski aprovechó la ocasión para pedir una vez más apoyo urgente.
La situación es "muy inestable" en las regiones del país afectadas por la ofensiva rusa y cada envío de armamento "salva vidas humanas", aseguró.
Agregó que Rusia ataca "guarderías y escuelas" e hizo referencia al gran número de soldados y civiles abatidos, motivo por el que Ucrania necesita "sistemas antiaéreos eficientes".
En respuesta a su llamado, Macron anunció el envío de seis cañones pesados autopropulsados tipo Caesar, mientras que Scholz, blanco de numerosas críticas por la lentitud del apoyo militar alemán, dijo que aprobó el suministro de radares Cobra para defensa antiaérea.
Además, indicó que Alemania llegó a un acuerdo trilateral con Estados Unidos y con el Reino Unido para proporcionar a Kiev lanzacohetes múltiples.
"Paz muy lejana"
En vísperas de la visita de los líderes europeos se especuló con que buscarían presionar a Zelenski para aceptar compromisos de cara a un eventual acuerdo de paz con Rusia, un extremo que todos ellos negaron.
Scholz subrayó que no puede haber una "paz impuesta" y que deben ser "el Gobierno, el Parlamento, el pueblo de Ucrania" quienes decidan lo que es aceptable para alcanzar una paz que aún está "muy, muy lejos".
Draghi ahondó en la misma idea y señaló que una solución diplomática no puede prescindir de la "voluntad" de Kiev, sin la cual no es posible construir una paz "duradera y justa".
En este sentido Zelenski aseguró que Rusia no está dispuesta a abandonar su "curso de confrontación" y que para retomar las conversaciones estancadas, Ucrania está a la espera de "propuestas" y de "acciones reales" por parte de Moscú.
Recordó que incluso la presencia de los líderes europeos no disuadió a Rusia de amenazar este jueves a la capital ucraniana, donde sonaron por dos veces las alarmas antiaéreas, la primera poco después de que los jefes de Gobierno se bajaran del tren que los llevó a Kiev.