La complicada vida de "Jane Roe", la artífice del derecho a abortar en EE.UU.
FALLO. Vivió hasta 2017 bajo los cuidados de su hija, que ahora cuenta cómo transitó del caso "Roe versus Wade", que permitió legalizar la interrupción del embarazo, a ser una activista antiaborto.
Agencias
"Se llama Jane Roe y va a estar en los libros de historia". Con esa frase, Melissa Mills empezó a comprender quién era su madre, y ahora intenta explicar la compleja evolución de una mujer que ayudó a legalizar el aborto en EE.UU. y acabó metida en el movimiento para abolir ese derecho.
En una entrevista con la agencia Efe, la hija mayor de Norma McCorvey reivindica el legado de su madre, cuya demanda bajo el seudónimo "Jane Roe" derivó en la decisión de la Corte Suprema que en 1973 protegió el derecho a abortar en todo Estados Unidos.
"Ella renunció a muchas cosas para luchar por los derechos de las mujeres", dice Mills desde su casa en Katy, Texas.
Su madre falleció en 2017 en esa misma localidad donde Mills asegura ahora que McCorvey se sentiría "devastada" si se enterara de la decisión que anuló el precedente que llevaba medio siglo en vigor, conocido como "Roe versus Wade".
La verdad de "jane roe"
A simple vista, no es una afirmación sorprendente: su madre fue la artífice de ese histórico fallo, la joven que, embarazada contra su voluntad en un estado donde el aborto era ilegal, permitió que dos abogadas usaran su caso para proteger los derechos de millones de mujeres en EE.UU.
Pero en 1995, McCorvey se pasó al otro lado. Un pastor evangélico se mudó al lado de la clínica de abortos donde ella trabajaba en Dallas y, en cuestión de meses, consiguió que se uniera a la organización antiabortista Operation Rescue, conocida por acosar a los médicos que practicaban ese servicio.
Al final de su vida, McCorvey aseguró en el documental "AKA Jane Roe" que su activismo en el movimiento antiaborto fue una mera "actuación": "Yo tomaba su dinero y ellos me ponían delante de las cámaras y me ordenaban qué decir".
Consultada al respecto, su hija lo niega. La conversión de "Jane Roe" al lado antiaborto fue "genuina", asegura. Sí, percibía un "sueldo", pero su mensaje en el documental nació sobre todo del "dolor" que le provocó que, "cuando realmente enfermó", los activistas conservadores la dejaran de lado.
"Eso le dolió mucho. Ya no la necesitaban, ya no podían sacar nada más de ella. Se sintió como si la hubieran abandonado a su suerte", recalca Mills.
Para explicar el giro copernicano que dio su madre a mediados de los 90, Mills menciona dos factores: la convulsa infancia de McCorvey, educada como "testigo de Jehová", y la "depresión" que le generó el haber hecho pública su identidad como "Jane Roe".
"La gente le decía que era el diablo, que era responsable de la muerte de 60 millones de bebés", recuerda.
En el fondo, reconoce Mills, lo que buscaba su madre puede resumirse con una palabra: amor.
Vida de "dolor y rabia"
Norma Leah Nelson -nombre de soltera de McCorvey- nació en 1947 en un hogar pobre de la Luisiana rural, y su infancia fue un torbellino: su madre era alcohólica y la maltrataba y su padre no tardó en abandonarlas. Era un entorno de "dolor y rabia", relató en su primera autobiografía, "I am Roe" (1994).
Con apenas 10 años, Norma robó dinero de una estación de servicio para huir junto a una amiga a Oklahoma. La metieron en un internado católico, donde dijo haber sufrido abusos sexuales, y después la enviaron con un amigo de su familia, que la violó casi a diario durante un mes.
Esas experiencias la volvieron una mujer "dura, que desconfiaba mucho de la gente", con un espíritu libre y "errático", según su hija.
Solo tenía 15 años cuando se casó con el padre de Mills, un hombre llamado Woody McCorvey que le dio una paliza al enterarse de que estaba embarazada. Ella huyó a la casa de su madre y le confesó que era lesbiana.
El bebé acabó bajo la custodia de su abuela, mientras la futura "Jane Roe" se sumergía en el alcohol y las drogas.
"Norma iba entrando y saliendo de mi vida. Durante muchísimo tiempo pensé que era mi hermana, porque la veía solo a veces: en las fiestas, en los cumpleaños...", relata Mills.
En una de esas fiestas, alguien le dijo por primera vez que su madre era "Jane Roe", pero ella tardaría años en entender "lo que eso significaba".
Mills fue la única de las tres hijas de McCorvey que conoció realmente a su madre. En 1967, Norma tuvo otra niña, Jennifer, a la que dio en adopción; y en 1969 llegó el embarazo del "bebé Roe".
McCorvey no quería volver a pasar por lo mismo. Abortar era ilegal en Texas, pero ella lo intentó: se lo pidió sin éxito a su ginecólogo y acudió a una clínica clandestina donde la policía acababa de hacer una redada. Desesperada, llamó a un abogado de adopciones, quien le dio el nombre de otra letrada, Linda Coffee.
Junto a su compañera Sarah Weddington, Coffee llevó el caso de McCorvey al Tribunal Supremo, que emitió su histórico fallo en 1973. Décadas después, Norma se quejaría de que la trataron como un "peón". Lo que ella quería era abortar y el litigio duró tanto que tuvo que tener a su tercer bebé y darlo en adopción.