A quince años del nacimiento de Los Ríos y del triunfo de sus habitantes
CONMEMORACIÓN. El 2 de octubre de 2007 comenzó la historia de la anhelada Nueva Región, dejando oficialmente atrás los 33 años de dependencia de Los Lagos.
Hoy se cumplen exactos quince años desde la creación oficial de la XIV Región de Los Ríos y de la Provincia del Ranco en su territorio. Aquel día sesionó por primera vez el Gobierno Regional, tras siete meses de preparación.
El proceso había comenzado el 16 de marzo de ese año, con una gran fiesta ciudadana realizada para acompañar a la Presidenta de la República Michelle Bachelet en la promulgación de la Ley N°20.174, que creaba la Nueva Región.
Esos acontecimientos serán recordados hoy en el Teatro Regional Cervantes, ocasión en que el gobernador regional Luis Cuvertino y los catorce miembros del cuerpo Core entregarán 15 distinciones a diversas personalidades que han aportado al desarrollo de la zona y han destacado por su trabajo a nivel político, deportivo, social, académico y cultural. (Ver recuadro)
Pero un nuevo cumpleaños de Los Ríos resulta el momento preciso para mirar atrás y recordar que fue un movimiento unitario de la población de la zona y el fruto de liderazgos fuertes a nivel público y privado el que posibilitó que esta zona dejara atrás ese 2 de octubre de 2007 más de tres décadas de dependencia obligada de Los lagos.
Desde ese punto de vista, la creación de la Región de Los Ríos hace tiempo dejó de ser un mero acontecimiento de tipo administrativo para la población, llegando a entenderse como un hito de verdadera justicia, tanto con el territorio de la antigua provincia de Valdivia como también con sus habitantes, quienes dieron, sobre todo en los pasos previos a que se concretara la división regional, muestras de ser una comunidad informada, fuerte, unida y beligerante.
Y la historia no hace más que ratificar esta idea. Primero, desde que en los años 60 se crearon las llamadas Oficinas Regionales de Planificación (ORPLAN), cuya finalidad era planificar la inversión pública en las distintas zonas del país, y donde Valdivia fue considerada la capital técnica de un territorio que, en principio, incluía las provincias de Cautín, Valdivia y Osorno.
A menos de una década de funcionamiento de esas reparticiones, el trabajo sufrió un corte con el Decreto N°575, del 11 de junio de 1974, que dividió administrativamente a Chile en trece regiones.
Ese hecho implicó el desmantelamiento y el traslado del aparataje público hasta la lejana ciudad de Puerto Montt que alcanzaba la categoría de capital de la nueva región de Los Lagos e incorporaba en la comunidad local un sentimiento de doloroso despojo.
Sin duda ese trago amargo y el convencimiento de la profunda injusticia de la medida fue lo que determinó gran parte de las quejas y las acciones que se llevaron a cabo desde entonces en torno a lograr una nueva separación regional, como, por ejemplo, la creación en 1977 del Comité Provincia de Valdivia Nueva Región y, posteriormente el Comité Femenino por la Nueva Región.
Estas dos instituciones ciudadanas impulsaron durante treinta y tres años, desde 1974 hasta 2006, un intenso trabajo de gestión conjunto, además de múltiples actividades e iniciativas tendientes a visibilizar la necesidad de que Valdivia volviera a tener autonomía territorial, una labor en la que se fueron sumando también autoridades municipales, legisladores y representantes de organizaciones territoriales y funcionales y de las doce comunas.
Bajo ese contexto y ya a fines de los años 90, el presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle, haciendo un reconocimiento de las características propias de la entonces Provincia de Valdivia y de sus habitantes dictó un instructivo presidencial que otorgó a los servicios públicos provinciales atribuciones especiales y un mayor poder de gestión a la hora de sostener su vínculo de trabajo con las secretarías ministeriales de Puerto Montt.
En paralelo y fruto de un trabajo conjunto de autoridades locales y representantes de los mundos privado, social y académico, surgió la construcción de la denominada Agenda Pactada de Desarrollo, un instrumento que fijaba los lineamientos básicos para la construcción de una estructura regional eficiente y enfocada en el desarrollo a futuro.
La existencia de estas dos instancias, sumada a la creciente fuerza que había adoptado el movimiento social en la región, llevó a que nuevamente desde la Presidencia de la República, ahora a cargo de Ricardo Lagos (2000 -2006), se dieran los pasos que definitivamente permitieron concretar el anhelo de la división regional.
El primero de ellos fue la modificación en la Constitución Política de la República de Chile de dos artículos que establecían el "13" como el número fijo de regiones en que se dividía Chile y que representaba, por cierto, el gran escollo a superar.
Posteriormente, vino el compromiso del mismo jefe de Estado en cuanto a que al cierre de su mandato sería presentado el proyecto de creación de nuevas regiones, lo que en este punto favorecía directamente tanto la aspiración de Valdivia como la de Arica y Parinacota (ambas fueron creadas casi en paralelo) y que contó con un amplio apoyo del mundo político, resultando aprobado a fines del mismo año 2006 en ambas cámaras del Congreso Nacional.
De ahí en adelante, la historia siguió su curso natural y fue a la Presidenta Michelle Bachelet en su primer mandato (2006-2010) a quien le correspondió promulgar la Ley N°20.174, hecho que se desarrolló el 16 de marzo de 2007, tras lo cual siguió la publicación de la norma en el Diario Oficial. Luego, el 2 de octubre, el ministro del Interior (s), Felipe Harboe firmó en Valdivia el decreto de traspaso de responsabilidades jurídicas y administrativas del nuevo territorio.