Mantener el uso de las mascarillas
En los centros de salud es obligatorio seguir utilizando cubreboca, pero ¿qué pasa en las farmacias? El tema está abierto. Desde la comunidad sería interesante sumarse a la reflexión del Colegio de Farmacéuticos. Prevenir nunca está de más; es un gesto simple y de amplios beneficios.
La pandemia no ha terminado, los contagios registran alzas y las muertes por covid-19 llegan casi a mil cien personas en Los Ríos. Sin embargo, en las calles y espacios públicos parece que nada ocurriera. Las vacunas y los relajos en las medidas de restricciones dan sensación de seguridad y se ha vuelto a ver aglomeraciones; hay escaso respeto al control de temperatura, poco uso de alcohol gel y bajísimas opciones de ver personas utilizando mascarillas.
Por una parte esta "normalidad" hace bien para el ánimo y la economía; pero, por otra, el excesivo relajo de las normas puede traducirse en riesgos de largo plazo. En ese contexto es que se hace atendible el llamado que ha realizado a nivel nacional el Colegio de Químicos Farmacéuticos y Bioquímicos de Chile, respecto de generar la obligatoriedad de protección en el interior de las farmacias. Que clientes y dependientes usen cubreboca siempre, solicitan ellos.
Esta idea nace del postulado gremial respecto que las farmacias son "centros de salud" (así reconocidas en el Código Sanitario), es decir, mucho más que un espacio de venta de medicamentos.
A esos lugares llegan las personas con síntomas de enfermedades en busca de orientación; sobre todo sucede así en el caso del covid-19, cuyas señales son tan similares a las de una gripe. Más ahora que se está desarrollando la campaña "Antígeno en tres pasos" a través de la cual las farmacias venden a bajo costo los kits de autotesteo de contagio, para generar autorreportes de pacientes, sin necesidad de ir a un laboratorio.
En Los Ríos, por ejemplo, es posible adquirirlos en Valdivia, La Unión y Panguipulli, cumpliendo con un protocolo de identificación, ya que el test cuenta con un número de folio que va asociado al ID de la persona que adquiere el producto, con el cual podrá auto reportarse posteriormente. Para esta compra, no se necesita receta ni orden médica, basta ir a la farmacia. Y si se atiende estos casos -como otros- correspondería el uso de mascarillas, por lógica. Sin embargo, a nivel ministerial solamente se ha indicado que es "altamente recomendable", no obligatorio.
Considerando lo anterior, desde la comunidad sería interesante sumarse a la reflexión del Colegio de Farmacéuticos. Prevenir nunca está de más, es un gesto simple y amplios beneficios.