Apoyo para mejor aplicación de Casen
La principal encuesta para medir pobreza está en pleno desarrollo y se requiere que la comunidad contribuya en el proceso. Los datos de 2020 fueron recogidos en pandemia y de forma telefónica; por lo cual pueden inducir a error. Ahora el estudio se aplica en forma presencial.
Hasta el 31 de enero se llevará adelante a nivel nacional la aplicación de la Encuesta Casen (Caracterización Social), el principal instrumento que tiene Chile para medir la pobreza por ingresos y multidimensional, base para orientar las decisiones en políticas públicas, para ir en ayuda de la población más vulnerable. El proceso comenzó en noviembre y se encuentra a cargo del Centro de Microdatos (CMD) del Departamento de Economía de la Universidad de Chile, cuyos equipos se han desplegado en todo el país para cubrir un universo total de 70 mil viviendas.
Este ejercicio se realiza cada dos años, pero ahora es particularmente importante, porque se retoma el contacto presencial para registro de datos. Según explicó la seremi de Desarrollo Social y Familia de Los Ríos Vanessa Huaiquimilla, en la Casen anterior, efectuada en 2020, debieron aplicarse sondeos telefónicos debido a la pandemia y eso pudo ver alteradas las cifras; ahora se busca actualizarlos mejor.
En total en la zona -dijo la autoridad en entrevista con www.soyvaldivia.cl - se espera llegar a 5.400 hogares y, hasta el 12 de diciembre, el avance era de un 47%. Es una cifra favorable, pero de todas maneras realizó un llamado a la ciudadanía a colaborar con la entrega de antecedentes. Recordó que se trata de una entrevista confidencial, que los encuestadores están identificados y que responder no incide en la situación personal del entrevistado. "Nadie pierde o gana beneficios por ser consultado; pero la información que se logre levantar es muy valiosa para que nosotros, como Estado, podamos priorizar las decisiones hacia quienes más los necesiten", enfatizó.
De acuerdo a los datos de 2020 la tasa oficial de pobreza por ingreso en Chile pasó de 8,6% registrado en 2017 a 10,8% en 2020; mientras que en la región, el alza fue de 12,1% a 12,2%, un leve cambio, pero notoriamente mayor al promedio país. Se trata de números preocupantes y ahora, lamentablemente, todo indicaría una profundización de ellos debido a la crisis económica que enfrentamos y que -auguran los analistas- se agudizaría en 2023. En atención a ello se hace aún más urgente contar con datos confiables, algo en lo cual puede contribuir la ciudadanía.