Una inversión de US$2.000 millones realizará el Estado para respaldar a las personas más vulnerables en el retorno al año laboral en marzo, justo cuando se realizan pagos como colegiaturas, uniformes y patentes de vehículos, sobrecargando el presupuesto familiar en un escenario de recesión económica y con la inflación sobre el 10%.

Propuestas como la creación de un bolsillo electrónico desde donde se descuente el 19% del costo de los alimentos a los consumidores, así como duplicar el Bono Marzo, elevar la Asignación Familiar (AF), ampliar la rebaja de medicamentos, extender el Programa de Alimentación Escolar (PAE) e incrementar el monto de la Beca de Alimentación para la Educación Superior (BAES), ampliar la postulación al IFE Laboral y al Subsidio Protege durante todo el primer semestre, junto con dar garantías estatales de 50.000 millones para créditos destinados a construcción, fueron anunciados por el Ejecutivo. La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, explica cómo estas disposiciones llegarían a las personas en caso de ser aprobadas en el Congreso en los próximos días.

-¿Cuándo sería la fecha clave?

-Es bien probable que el proyecto de ley esté dentro del mismo mes tramitado, porque son medidas de ayuda social en las que, más allá de algunos aportes que puedan hacer los parlamentarios, la verdad es que creemos que se van a aprobar rápidamente. El Bono Marzo, como se duplica, se va a pagar en dos cuotas: la primera será la tradicional, del Aporte Familiar Permanente, casi $60.000, en la segunda quincena de febrero. La segunda parte, es decir, otros $60.000, se tendría que pagar, si es que la ley está lista en enero, como esperamos que sea y así ocurra, dentro de los primeros días de marzo.

-¿Cómo funciona el bolsillo familiar electrónico?

-Dentro de la Cuenta RUT (de BancoEstado) va a haber una subcuenta que será el bolsillo familiar electrónico, donde a cada beneficiario de asignación familiar, o subsidio único familiar, se le van a depositar $13.500 por carga. En Chile los hogares tienen un promedio de dos cargas. Con este aporte la persona va a ir a un almacén o supermercado a comprar alimentos, y al momento de pagar se le va a descontar, de ese bolsillo electrónico, el 20% de la compra.

-El ministro de Hacienda, Mario Marcel, dijo que era como devolver el IVA (19%).

-Tiene un símil por el monto. Varios parlamentarios plantearon, en distintos minutos, devolver el IVA a los alimentos, pero ocurre que eso no se transfiere necesariamente a los precios de los consumidores, por tanto, en este otro mecanismo sí hay una efectividad en el sentido que hay un descuento directo.

-¿Esto será válido en cualquier supermercado o almacén?

-La operatividad va estar definida en los próximos días, pero la idea es que sea el mayor alcance en términos de locales de compra y que esté restringida a alimentos. Las personas, asimismo, si no tienen Cuenta RUT, deben pedirla en el banco o por internet, porque el bolsillo electrónico va a quedar para el futuro, ya que, ni Dios lo quiera (vivir una situación así), pero en el caso del incendio de Viña del Mar, por ejemplo, el bono para la compra de materiales (para reconstruir) se puede depositar ahí, entonces responde a distintas dinámicas para ejecutar políticas públicas rápidamente.

-¿Y si no tiene saldo en la cuenta?

-Este aporte al bolsillo electrónico no es plata que las personas vayan y saquen, sino que la pueden usar al comprar; y si no se gasta toda este mes y se junta con la del siguiente, no se pierde, se acumula. En el caso del aporte familiar permanente, el Bono Marzo y el bolsillo electrónico, no hay que postular, pero si no tienen la cuenta, hay que sacarla.

-Funciona como la BAES, con el bloqueo de que sólo se puede usar en comida.

-Tiene una lógica parecida. La BAES también se reajustará en $5.000, sube de $37.000 a $42.000, que van a recibir 672.000 estudiantes.

-La oposición ha pedido que existan ayudas equivalentes para la clase media, ¿es posible ampliarlas?

-Estas ayudas llegan a los sectores medios y bajos. Por ejemplo, en la asignación familiar hay beneficiarios con sueldos de hasta $990.000 y, por ende, tienen el reajuste también de la asignación, la ampliación de la cobertura a 900.000 niños, el derecho al Bono Marzo, el bolsillo electrónico y, por otro lado, los beneficios como el IFE Laboral, por ejemplo, corta en (sueldos de hasta) $1.240.000 aproximadamente.

-¿Y qué pasa con las mujeres de 60 a 65 años, cuya edad de jubilación es menor a la de los hombres, con los vacíos que eso conlleva?

-Hubo una discusión en el Parlamento respecto a eso, pero estas son ayudas sociales que se dan más por el trabajo habitual de los Gobiernos y, en particular en este caso, con el objetivo de acompañar a las familias, porque el ajuste económico después de la pandemia no ha sido fácil, pero la discusión respecto de la PGU (Pensión Garantizada Universal) y la edad a la que las mujeres se jubilan se puede dar en el marco de la reforma previsional, teniendo claro que requiere un financiamiento público importante, cercano a los US$1.300, entonces para hacer un esfuerzo importante como ese se requiere incluso otra reforma tributaria de la que hoy estamos legislando, y que ha costado tanto que sea aprobada y que tiene como objetivo aumentar el monto de la PGU. Las propuestas tienen que ser responsables y tener un financiamiento adecuado, o si no se genera mucha frustración en las personas y desafección también del sistema político, generando poca participación, molestia y, diría yo, lo más complejo, la (pérdida de) confianza en el sistema político, más allá del Gobierno que sea o quien esté a la cabeza en determinado momento, es algo que no contribuye a una mayor democracia, ni tampoco a una mayor cohesión social.

-¿Se están evaluando más ayudas para este año?

-El Presidente ha señalado claramente que está permanentemente viendo las necesidades de las personas y, dentro del marco presupuestario con el que contamos, viendo los apoyos que se puedan entregar. Las ayudas que se presentaron van a estar esta semana discutiéndose en el Parlamento, a fin de poder implementarse rápidamente.

-Especialistas coinciden en que la economía podría ver su punto más alto de saturación a mitad de año.

-El ministro de Hacienda ha señalado que en el segundo trimestre de este año estaríamos viviendo el último proceso de ajuste de la economía. Ahí se produciría una inflexión y el crecimiento comenzaría a retomar su senda habitual, tras el ajuste pospandémico.

"Este aporte al bolsillo electrónico no es plata que las personas vayan y saquen, sino que la pueden usar al comprar; y si no se gasta toda este mes y se junta con la del siguiente, no se pierde, se acumula". "Estas ayudas llegan a los sectores medios y bajos. Por ejemplo, en la asignación familiar hay beneficiarios con sueldos de hasta $990.000 y, por ende, tienen el reajuste también de la asignación".