"Plan de Acción de Cambio Climático es un paso a un nuevo modelo de desarrollo"
La región de Los Ríos es la primera del país en contar con un plan de acción contra el cambio climático. ¿Qué importancia tiene este instrumento, que implica? El seremi de Medio Ambiente de Los Ríos, Alberto Tacón explicó los detalles en entrevista con www.soyvaldivia.cl y llamó a la comunidad a colaborar para que estas medidas generen efectos.
"Tener este plan es un hito muy importante para la región, también para el país", dijo Tacón y expuso que en junio de 2022 se promulgó la Ley Marco de Cambio Climático y en ella se establece que todos los gobiernos regionales deben desarrollar planes de acción de cambio climático.
"Básicamente, es una herramienta de planificación. En la región se inició el proceso de diseño del plan de acción regional hace varios años. Fuimos pioneros, una de las tres regiones piloto que iniciaron este proceso antes de que se promulgara la ley y hoy día somos la primera región en terminar este proceso".
¿En qué consiste este plan?
-Básicamente, el plan lo que establece primero es un diagnóstico, en el fondo una caracterización sobre qué es la región, qué clima tiene, qué paisaje, qué actividades productivas y a partir de ahí, cómo el cambio climático podría afectar a la economía regional y al medio ambiente. Es súper interesante, porque lo primero que analiza es cuál es el origen de las emisiones de gases de efecto invernadero en la región.
Somos una región que afortunadamente estamos contribuyendo más a la mitigación que a la emisión. Somos una región que hoy día está absorbiendo más gases de efecto invernadero de los que está produciendo. Es una muy buena noticia, pero también somos una región que está bastante afectada por los riesgos climáticos, porque estamos en una zona de transición entre un clima más mediterráneo, con veranos secos como lo que hay hacia La Araucanía, Biobío y un clima más húmedo, permanentemente húmedo, como la región de Los Lagos.
Hoy estamos viendo en parte de la región, en las comunas de Lanco, Mariquina y Máfil cómo la sequía en verano se está prolongando; se están secando las praderas y eso implica un cambio bastante importante en la actividad productiva.
Desde ese punto de vista, el plan define cuáles son esos riesgos climáticos para la actividad regional y propone una serie de medidas de adaptación, por un lado, de cómo hacer frente a estos cambios que están ocurriendo pero también de mitigación, de cómo reducir el impacto tanto de las emisiones de gases de efecto invernadero como de los efectos del cambio climático a nivel del ecosistema.
¿Qué significa que seamos una región que más que emitir gases de efecto invernadero, los captura?
-Básicamente la región tiene todavía, afortunadamente, más del 50% de la superficie cubierta de bosque nativo. Estamos en una situación muy privilegiada, nuestra región es rica en bosque nativo, en humedales que capturan gases efecto invernadero y eso nos pone en una situación realmente bastante más cómoda que otras regiones, donde la frontera agrícola avanzó y desplazó los bosques nativos por actividad, por suelos agrícolas productivos. Por otro lado, también gran parte de la actividad económica de la región se basa en la actividad forestal.No solamente el bosque nativo, sino también las plantaciones forestales contribuyen también a absorber bastante los gases de efecto invernadero.
Ese es un punto un poco polémico. ¿Plantaciones y nativos contribuyen?
-Justamente éste es un tema que es interesante cuando uno lo analiza desde el punto de vista de la huella de carbono, es decir, los gases de efecto invernadero asociados a la actividad productiva.
Las plantaciones evidentemente son árboles de rápido crecimiento que absorben mucho carbono, que lo almacenan de alguna manera, pero el uso de esas plantaciones de alguna manera también libera carbono. Tanto la cosecha forestal como después el procesamiento de la madera genera emisiones; entonces, por ejemplo, una plantación que en 15 o en 20 años es cosechada, pero después es destinada a leña, probablemente en 1 o 2 años más el carbono que estaba ahí retenido vuelve a ser liberado a la atmósfera, con lo cual la contribución neta en realidad no es muy grande en términos de secuestro de carbono. Sin embargo, bosques nativos que tienen árboles de 400, 500 años, tienen un stock de carbono almacenado que no solamente se almacena en la madera, también en el suelo, porque se va enriqueciendo en materia orgánica y eso contribuye a secuestrar gases de efecto invernadero en un plazo mucho más largo.
Desde ese punto de vista, la estrategia establece en su diagnóstico, cómo efectivamente el sector forestal contribuye a la huella de carbono; pero también cómo podemos adaptarnos a la condición de cambio climático mejorando la gestión, mejores prácticas forestales que contribuyan a reducir la emisión de carbono, pero también limitando, estableciendo áreas donde debiera revertirse desde una plantación forestal a volver a tener bosque nativo para recuperar algunas de las funciones ecosistémicas que van a estar más dañadas por el cambio climático. Estamos hablando, por ejemplo, lo que es la regulación hídrica, todo lo que es la producción de agua potable en algunas áreas que han sido muy afectadas también por el establecimiento de plantaciones.
¿Cómo se vincula el Plan de Acción de Cambio Climático con el área forestal, con fomentar el uso de la madera, por ejemplo?
-El plan tiene 10 medidas, es relativamente complejo. Hay algunas medidas, por ejemplo, que están enfocadas al sector productivo para reducir la huella de carbono y en particular al sector de la industria de la construcción. La construcción es uno de los principales focos de generación de gases de efecto invernadero y la construcción en madera, evidentemente permite que ese carbono, que está retenido en la madera de los árboles se mantenga ahí, no se libera a la atmósfera por un período de tiempo largo. Generalmente una casa tiene una vida útil bastante larga, con lo cual ese carbono se mantiene ahí. Si pensamos que la alternativa es construcción en concreto, obviamente que la madera responde más a los estándares que buscamos. La producción del cemento para construcción en concreto es bastante más protagonista de las emisiones a nivel global, no solamente en Chile.
A nivel global, la industria del cemento es uno de los grandes emisores de gases de efecto invernadero, entonces cambiar el sistema constructivo desde el cemento hacia la madera, evidentemente que contribuye a mitigar las emisiones. Y no sólo eso, sino que además una buena técnica constructiva permitirá la aislación térmica que reduce mucho el gas energético también en los domicilios. Ahí tenemos una tarea.
¿Qué vinculo tiene el plan con otras áreas productivas, con la promoción de consumo de productos locales ?
-Bastante vínculo. El transporte aumenta la huella de carbono. Si los alimentos que consumimos vienen de distancias muy largas, generamos más contaminación, que si preferimos aquello que se produce localmente y no debe viajar grandes distancias. El acortar el circuito de alimentación permite evitar la emisión de gases
"El acortar el circuito de alimentación permite evitar la emisión de gases de efecto invernadero asociados al transporte y garantiza soberanía alimentaria ..."
"Cada proyecto que se presente a evaluación ambiental va a tener que medir su huella de carbono y demostrar que es eficiente en el uso de estos gases de efecto invernadero..."
"
"