una alta erodabilidad de los suelos, la intervención humana que rompen los perfiles de equilibrio de las laderas sin ningún estudio técnico".
El director regional de Sernageomin igualmente explicó que "existen diferentes tipos de remociones en masa. Las que ocurren en la costa son distintas a las que ocurren hacia la cordillera. Buena parte son fenómenos naturales por el tipo de geología que tenemos acá en la región, y muchas otras son antrópicas, lo que significa que son producidas intervención humana, como por ejemplo romper un talud para hacer una casa que provoca el desequilibrio del cerro, y esto ocurre por falta de conocimiento y falta de conciencia de la gente, de entender en el lugar que estamos habitando desde el punto de vista del riesgo".
Consultado por el tamaño que debe tener un deslizamiento para ser considerado remoción en masa, explicó que "es muy relativo, porque dependen del área que esté afectada. Hay remociones pequeñas que tapan un camino, y otras gigantes que provocan catástrofes".
Carlos Johnson enfatizó sobre el proyecto que "lo que queremos es que esta información, la caracterización del suelo, se pueda utilizar como una herramienta. Estamos elaborando varios mapas a distintas escalas que van a servir para el ordenamiento territorial. Así se va a poder advertir dónde hay zonas peligro, dónde conviene o no construir, y con qué características. Va a ser una herramienta súper importante, y que conviene que la conozcan las autoridades que toman decisiones prácticas".
"Nuestro espíritu como servicio público, es que esta información le llegue a la población, ya que ellos son quienes finalmente se van a ver beneficiados con esta información, cuando las autoridades toman decisiones más informadas", enfatizó al autoridad.
Sobre los plazos del proyecto, el profesional sostuvo que "debe está terminando en junio de este año aproximadamente, por lo que quedan un par de meses para difusión. Una vez que esté ter minado el proyecto, que estén listos los mapas, vamos a difundir y entregar este proyecto a todas las autoridades, desde el Gobierno Regional hacia abajo".
"Lo importante es que los vecinos sepan en el lugar que están viviendo, cuáles son los riesgos que pueden tener, o cuál es el tipo de suelo. Lo que finalmente queremos es educar, en el sentido de que si van a hacer una obra, sean asesorados por expertos y además por autoridades que toman decisiones en las ciudades, especialmente unidades de emergencias, obras o vivienda. Vamos a preparar charlas especiales en distintos tipos de lenguaje técnico, para que el mensaje llegue a todo el mundo", añadió.
Contraparte técnica
Paola Ramírez es geóloga de la Unidad de Peligros Geológicos de Sernageomin Los Ríos, y a su vez la contraparte técnica del proyecto.
La profesional explica que la remoción en masa "es un proceso que ocurre en las laderas, activado principalmente por la gravedad, y provocan que materiales como roca y suelo caigan ladera abajo, lo que puede ocurrir en volúmenes grandes de miles de toneladas o volúmenes muy pequeños de material que se deslizan por las laderas, y que dependiendo de la velocidad pueden involucrar un riesgo".
Y prosiguió: "En general, las remociones en masa se concentran en la cordillera andina, precordillera y en la Cordillera de la Costa, que son los lugares donde tenemos relieves altos, con pendientes, por lo que es ahí donde más se desarrollan este tipo de procesos. Dentro de las comunas que tienen mayor cantidad de registros, en la costa tenemos Valdivia y Corral, mientras que en la cordillera, principalmente las comuna de Panguipulli, Lago Ranco y Futrono".
Con respecto a las causas, comenta que "es difícil separarlas de manera exacta, porque la intervención humana no siempre es sencilla de establecer. Cuando se está ejecutando una intervención, con una máquina que está trabajando y cae material, en ese caso es fácil determinar la acción antrópica; pero cuando tú modificas la ladera y las consecuencias son a mediano o largo plazo, es más difícil poder determinar si finalmente la acción humana fue gatillante de la remoción. Pero efectivamente, cuando se hacen cortes de taludes para construcción de viviendas o caminos, donde se interviene la forma natural de la ladera, se favorece que ocurran este tipo de procesos".
En relación a la elaboración del catastro, la geóloga explicó que "representa todas las remociones en masa que han ocurrido históricamente en el territorio. A partir del terremoto de 1960, a través de fotointerpretación de imágenes de la época, se puede ver el área afectada por las remociones que son muy numerosas. Ocurre que después la vegetación crece en esas zonas, lo que tapa la evidencia de que haya ocurrido el proceso. Sin embargo, también queda evidencia de los cambios en la cobertura vegetal, ya que se puede apreciar mucho renoval mientras el resto del bosque se nota más antiguo. Ahí uno puede verificar que hubo una remoción que removió la vegetación y que luego volvió a crecer".
"También se han ido analizando fotografías aéreas e imágenes satelitales que existen a la fecha, tratando de identificar la mayor cantidad de eventos que hayan ocurrido en las últimas décadas", agregó.
Consultada por la importancia del estudio, Paola Ramírez sostuvo que "es muy relevante en el sentido de que nos va a permitir identificar zonas críticas donde hay que empezar a hacer estudios de más detalle, para el ordenamiento del territorio, el diseño de obras, para el monitoreo en caso de ser sectores que evidencian una alta recurrencia de remociones en masa, que son eventos que periódicamente están ocurriendo, por lo que si afectan a algún tipo de infraestructura, es muy importante saber en qué momento se gatillan y poder dar las alertas oportunas o definir normativas de uso de suelo en esos sectores para que no haya afectación ni de infraestructura ni de vidas humanas. Entonces, es muy relevante para toda la planificación del uso del territorio".
Y agregó: "El taller que realizamos fue orientado principalmente a los municipios de la región, y específicamente con los encargados de emergencia, direcciones de obras y de planificación comunal, justamente para poder tener la retroalimentación respecto de cuáles son las necesidades que ellos identifican en sus comunas respecto de este tema".
180 millones de pesos financiados por el Gobierno Regional es el monto de inversión del proyecto de Sernageomin.
14 meses es el plazo de ejecución del proyecto, por lo que se espera su conclusión para mediados de este año.