Muerte de palestino en huelga de hambre eleva tensión con Israel
CONFLICTO. Tras el deceso del reo Jader Adnan se produjeron lanzamientos de cohetes, un ataque con disparos, protestas y una huelga general en Gaza y Cisjordania.
La muerte del conocido preso palestino Jader Adnan, tras pasar 86 días en huelga de hambre en una cárcel israelí, aumentó la tensión en la zona, donde se registraron lanzamientos de más de 30 cohetes, un ataque con disparos y protestas, acompañados de una huelga general en Gaza y Cisjordania. El hecho, incluso, fue calificado de "asesinato" por ONGs de Palestina.
Adnan, de 44 años, fue declarado muerto en la mañana de ayer en un hospital israelí en las afueras de Tel Aviv, tras ser hallado inconsciente en su celda pocos minutos antes.
Su huelga de hambre había comenzado el 5 de febrero, el mismo día que fue detenido por las autoridades israelíes, que poco después lo acusaron de terrorismo e incitación a la violencia como miembro de la Yihad Islámica Palestina (YIP), considerada terrorista por Israel, EE.UU. y la Unión Europea.
Desde entonces, su condición se había ido deteriorando, lo que generó la preocupación de múltiples autoridades palestinas que se sumaron a su petición de ser traslado a un hospital y liberado.
Adnan, que según el Servicio de Prisiones israelí se había negado a recibir atención médica en la cárcel Nitzán de Ramla donde se encontraba, cursaba su décima detención y su quinta huelga de hambre. La más larga había sido en 2012, que desencadenó una huelga de hambre masiva entre cerca de dos mil prisioneros, convirtiéndolo en un símbolo de resistencia para los presos palestinos en cárceles israelíes.
"asesinato premeditado"
Grupos de defensa de derechos humanos palestinos denunciaron que Israel actuó con "negligencia médica" y llevó a cabo "un asesinato premeditado" de Adnan. "La práctica sostenida y deliberada de negligencia médica" por parte del Servicio de Prisiones israelí y "la denegación de atención hospitalaria" constituyen "un grave y sistemático incumplimiento de los Convenios de Ginebra", denunció el Consejo de Organizaciones de Derechos Humanos Palestino.
Agregó que es "un asesinato premeditado por parte del Estado de Israel" contra un preso que también hizo su huelga de hambre para denunciar "las condiciones inhumanas de encarcelamiento en las prisiones israelíes".
Poco después de confirmarse la muerte del recluso, miembro de Yihad Islámica Palestina (YIP) y primer preso palestino en morir en tales circunstancias desde 1983, se lanzaron al menos 32 cohetes en varias ráfagas desde Gaza a Israel desde primera hora de la mañana y siguieron a lo largo del día, sostuvo el Ejército israelí.
Algunos de estos impactaron contra unas obras de construcción en la ciudad israelí de Sderot y causaron heridas a tres trabajadores chinos, de los cuales uno resultó grave.
Por su parte, cinco palestinos fueron heridos en la localidad palestina de Beit Hanún, en el norte de Gaza, por el impacto de esquirlas de varios cohetes interceptados por el sistema de defensa antiaéreo Cúpula de Hierro israelí.
"israel Pagará el precio"
La Cámara de Operaciones Conjunta de Gaza, que integra facciones armadas del enclave, entre ellas los movimientos islamistas Hamás y la YIP-, se atribuyó la autoría de la respuesta a la muerte del recluso, y aseguró que llevaría a cabo más lanzamientos, advirtiendo a Israel que "pagará el precio".
La declaración generó también protestas y la convocatoria de una huelga en los territorios palestinos ocupados.