Emergencia en el sector de La Aguada
Más de 1200 personas cumplirán un mes sin agua potable en Corral. Piden "menos reuniones y más soluciones".
La situación que se encuentran viviendo los vecinos de La Aguada en Corral es grave. Pasar casi de un mes sin suministro de agua potable constituye un riesgo severo para las condiciones sanitarias de un lugar y para el bienestar emocional de quienes viven la situación. Por ello resulta entendible la solicitud del alcalde Miguel Hernández y de algunos parlamentarios para decretar "zona de emergencia" y permitir la llegada rápida de recursos para aplicar soluciones más allá de los camiones aljibe y los estanques, que solamente pueden entregar un 50% de lo que una familia requiere diariamente para vivir.
No hay claridad respecto de esa decisión. Mientras, el Ministerio de Obras Públicas dispuso que la próxima semana se instale tuberías para intentar la captación desde otra fuente natural y regularizar el servicio. También el Gobierno Regional aprobó un subsidio por $23 millones para que la municipalidad repare el sistema.
Todo suma, pero demora. Los pobladores afectados manifiestan inquietud por "demasiadas reuniones y pocos resultados", razón por la cual mantienen la toma en el acceso al área, en señal de protesta y como mensaje "para que las autoridades no se olviden". En particular buscan impedir el paso de los equipos de la empresa Urales, a la cual se le responsabiliza por lo ocurrido: sus faenas en un punto alto del camino San Juan-Quitaluto, habrían generado desplazamientos de tierra que se agravaron con las lluvias y contaminaron el estero, dañando el sistema de Agua Potable Rural que llega a 1.200 personas.
La entidad asegura que solamente se ciñó al contrato establecido; los concejales creen que faltó supervisión del MOP y anunciaron que irán a la Contraloría. El alcalde, en medio de la polémica, alza la voz y pide "solucionar primero el problema de la gente y después buscar culpables". Tiene razón. Pero también pide una mirada más amplia hacia la forma en que se construyen los tramos de la largamente esperada ruta Corral-Valdivia. No olvidemos la inundación de San Juan en junio de 2022 y otro problema que hay en el área, con vertederos clandestinos que se ven removidos y pueden contaminar las fuentes de agua.